Aunque se tiene, el narcotráfico en las comunidades indígenas aún no ha descompuesto la convivencia social, aseveró la Delegación de la CDI.
El Siglo de Durango
Pese a que durante 2006 alrededor de 200 indígenas estuvieron en prisión por delitos como homicidio, violación, narcotráfico, entre otros, la Delegación de la CDI aseguró que actualmente la violencia en este sector de la población ha disminuido.
Sin embargo, Salvador Castañeda Rangel, delegado de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), admitió que el narcotráfico ha permeado entre los indígenas, aunque todavía no alcanza niveles que pudieran descomponer la convivencia social.
Aseveró que la pobreza en que se encuentran los indígenas no es un factor determinante que los orille a dedicarse a actividades ilícitas, pues el narcotráfico se está dando en la actualidad dentro de todos los niveles socioeconómicos, “no toda la población está metida en esto”.
Reconoció que en algunos lugares donde se ubica población indígena, principalmente las barrancas, se utiliza para la producción de enervantes.
“El narcotráfico entre los indígenas es una realidad que se da, la gente gana el dinero fácil, pero no lo usa para mejorar sus condiciones de vida”, expresó.
Castañeda Rangel aseguró que en 15 días podrán tener resultados sobre la conformación de un censo compuesto por indígenas que se encuentren en prisión por cualquier delito, pues durante el año pasado se tuvieron 200 en estas condiciones.
El funcionario federal justificó que cada día hay menos violencia, principalmente contra las mujeres en las comunidades indígenas; lo que pasa –dijo- es que ahora se tienen más registros que en años anteriores y se dan a conocer.
Ahora también a las mujeres indígenas se les reconocen más sus derechos, tienen una mayor participación, con quienes los derechos y tradiciones no deben ser aprovechados para ejercer la fuerza contra ellas, argumentó el Delegado.
“Es mentira que debido a las normas y costumbres los hombres deben tener tres mujeres o más, eso depende de cada quien, al igual que golpearlas o tenerlas encerradas en casa, porque en esto se respeta a la mujer”, agregó.
Por ello, reiteró que entre las poblaciones indígenas de Durango la violencia ha disminuido y el escenario sobre esta problemática ahora es distinto a otros años.
Recursos para encarcelados
Actualmente la Delegación en el estado de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) maneja un presupuesto por el orden de 135 mil pesos para el programa de encarcelamientos dirigido al apoyo jurídico de indígenas que se encuentran en prisión.
Este esquema se utiliza para el pago de fianzas, tras recibir sentencias, o la contratación de un abogado para asesor jurídicamente a los indígenas que se encuentran encarcelados por algún delito cometido, según informes de la dependencia federal.
Sin embargo, de acuerdo con la operatividad de programa, el fondo no puede ser utilizado en aquellos indígenas que son reincidentes en cometer delitos o que éstos sean considerados graves.
