Pettitte confiesa haber usado hormona de crecimiento humano

Andy Pettitte usó hormona de crecimiento humano para recuperarse de una lesión en el codo en 2002, confesó ayer el pitcher de los Yanquis de Nueva York dos días después de ser nombrado en el informe Mitchell.

Pettitte dijo que usó la hormona en dos ocasiones, y enfatizó que lo hizo para sanar más rápido y no para mejorar su rendimiento. Además, recalcó que nunca utilizó esteroides.

“Si lo que hice fue un error de juicio de mi parte, pido disculpas”, dijo Pettitte ayer en un comunicado divulgado por su representante. “Acepto la responsabilidad por esos dos días”.

El jueves, Pettitte fue uno de 85 jugadores identificados en la pesquisa encabezada por el ex senador George Mitchell sobre el uso de esteroides y otras sustancias para mejorar el rendimiento. El zurdo no había hablado públicamente sobre la acusación.

Pettitte le pidió al preparador físico que compartía con Roger Clemens, Brian McNamee, que lo ayudara a recuperarse de una lesión con la hormona HGH a comienzos de la temporada, según el informe. McNamee narró haber inyectado a Pettitte de dos a cuatro ocasiones, indicó Mitchell.

“Yo estaba lesionado en el 2002. Había escuchado que la hormona de crecimiento humano podría ayudar a mi codo a sanar más rápido”, expresó Pettitte en un comunicado entregado a la AP por su agente Randy Hendricks.

“Sentía la obligación de regresar lo más rápido posible a mi equipo. Por esta razón, y sólo por esta razón, durante dos días probé la hormona de crecimiento humano. Aunque no violaba el reglamento del beisbol, no me sentí cómodo con lo que estaba haciendo, así que paré”.

“Eso es todo: dos días de mi vida; dos días de toda mi carrera, cuando yo estaba lesionado y en la lista de inactivos”, agregó. “No estaba buscando una ventaja. Quería sanar”.

Pettitte no fue vinculado con esteroides en el informe, y aseguró que nunca los ha usado.

“Tengo el mayor de los respetos por el beisbol y siempre he tratado de vivir mi vida de forma honrosa”, afirmó. “Si he defraudado a la gente que se preocupa por mí, lo siento, pero espero que me escuchen cuidadosamente y que entiendan que dos días de quizás mal juicio no deben arruinar toda una vida de trabajo y dedicación.

“He tratado de hacer las cosas de la forma correcta toda mi vida y, de nuevo, pido que pongan esos dos días en su justo contexto. La gente que me conoce sabrá que lo que digo es la verdad”, señaló.

El zurdo de 35 años tiene marca de 201-113 en su carrera en las mayores, que comenzó en 1995 con los Yanquis. Pettitte ganó cuatro títulos de Serie Mundial con Nueva York, y lanzó con los Astros de Houston de 2004 a 2006.

Este año regresó a los Yanquis y tuvo marca de 15-9. Hace poco firmó un contrato de un año y 16 millones de dólares con Nueva York.

Clemens también es mencionado en el informe Mitchell como usuario de esteroides.

Receptor de Marlines se convirtió en distribuidor de drogas

El ex receptor de bullpen de Marlines de Florida, Luis Pérez, suministró cualquier tipo de sustancias desde esteroides hasta marihuana a jugadores entre 1998 y 2002, según establece el reporte Mitchell.

El informe del ex senador George Mitchell, dado a conocer la víspera, ha sacudido al mundo del beisbol al vincular a un buen número de jugadores de grandes ligas, con el uso de sustancias prohibidas.

Ex jugadores de Marlines no son la excepción y en esa lista aparecen los nombres de los receptores Paul LoDuca, Greg Zaun y el boricua Benito Santiago, los pitchers Kevin Brown, Ron Villone, Matt Herges y el mexicano Ismael Valdez, así como el jardinero Gary Sheffield.

Aunque el reporte Mitchell no menciona a ningún jugador de Marlines en el periodo entre 1998 a 2001 en que Pérez militó en el equipo, éste admitió que él mismo proporcionó drogas a cada uno de los jugadores de los peces.

Según el informe, Pérez se convirtió en "la principal fuente en el equipo para adquirir esteroides y droga prohibidas". En una de las entrevistas para el reporte, el ex receptor declaró que "casi cada jugador de los Marlines usaba algo desde esteroides hasta marihuana".

Pérez fue cambiado a Expos de Montreal en 2002 y, según el reporte, éste dijo que ahí "casi cada pitcher de bullpen también usaba algún tipo de esteroides".

En uno de los detalles más agrios del reporte, Pérez aseguró a los investigadores que "cuando los equipos estaban en San Diego, a menudo los jugadores cruzaban la frontera a México para obtener substancias prohibidas".

Según se dijo, Pérez aseguró que recibía hasta 500 dólares de pago de algunos jugadores para llevar sus maletas de entrada y salida a Canadá, y que conocía empleados de otros equipos que realizaban la misma tarea que él para obtener drogas para los peloteros.

Las grandes ligas nunca hubieran entrevistado a Pérez si no es porque en 2002, mientras trabajaba con Expos, éste le pidió a un empleado de Marlines que llevara una maleta de regreso a Florida (sur de Estados Unidos).

La maleta estaba sellada, lo que llamó la atención del manager de equipamento de Marlines, John Silverman, quien al abrirla encontró casi medio kilo de marihuana. La policía de Montreal fue llamada, y Pérez recibió después una multa de cinco mil dólares.

De los jugadores ex Marlines mencionados en el reporte, ninguno se encontraba en el equipo cuando estaban vinculados por el reporte con el uso de sustancias prohibidas. Gary Shefield y Benito Santiago fueron vinculados a la investigación de Balco sobre el dopaje de un importante grupo de atletas estadounidenses, que se dio a conocer después de que Pérez salió de Marlines.

El Lanzador Kevin Brown y el receptor Paul LoDuca se encontraban con Dodgers en el momento en que fueron vinculados, según el reporte, mientras que el receptor Greg Zaun se encontraba con Reales de Kansas City.

Informe de Mitchell genera enojo y tristeza

Sorpresa y estupor. Eso fue lo que demostró el ala defensiva de los Gigantes de Nueva York, Michael Strahan, después de ver los nombres que arrojó el reporte Mitchell en torno al dopaje en el beisbol.

Las ramificaciones de la investigación se extendieron el jueves mucho más allá del beisbol, generando sacudidas en otras ligas profesionales deportivas y fueron hasta la Casa Blanca, donde una portavoz del presidente George W. Bush expresó su esperanza de que “esto marque el comienzo del fin del abuso de los esteroides”.

Incluso un relevista medio, casi anónimo, se vio a sí mismo en la obligación de defenderse después de que fue relacionado con un caso que ha manchado a dos de los más grandes peloteros del deporte: Barry Bonds y Roger Clemens.

“No me preocupa”, señaló el lanzador de los Cardenales de San Luis, Ryan Franklin, entre los 85 peloteros actuales y retirados que fueron implicados en el informe que se llevó casi dos años en ser concluido.

Sin embargo, otros mostraron su preocupación con los hallazgos del informe, que podrían marcar el día del peor escándalo deportivo desde 1919, cuando los Medias Negras fueron acusados de haber vendido la Serie Mundial de ese año presionados por apostadores.

Además, qué pasará con los Cerveceros de Milwaukee, que apenas concluyeron un contrato por diez millones de dólares con su nuevo cerrojero, el canadiense Eric Gagne, y luego leyeron las vergonzosas acusaciones de que recibió dos paquetes con hormona de crecimiento y en una le preguntó a su proveedor sobre cómo sacarle el aire a una jeringa.

“Nuestra meta es contratar al mejor equipo posible basados en información que tenemos a la mano”, señaló el gerente general Doug Melvin a través de un comunicado.

“Aunque nos hemos decepcionado con ver información relativa al 2004, con respecto a Eric en el informe, creemos todavía firmemente que su inclusión con el equipo nos convierte en un conjunto mucho más fuerte en momentos que nos encaminamos a la temporada del 2008”, indicó Melvin.

Gagne terminó la temporada 2007 con los Medias Rojas de Boston, que ganaron la Serie Mundial.

Por su parte, el siempre extrovertido lanzador de los Medias Rojas, Curt Schilling, hizo una valoración del informe.

“No van a faltar opiniones de los medios de prensa que castiguen, insulten y señalen culpables entre los nombres involucrados”, indicó Schilling, quien expresó que muchos de estos periodistas se hicieron de la vista gorda cuando estaba ocurriendo todo lo que el informe Mitchell denunció, según expresó en su página de Internet, 38pitches.com.

“Ciertamente no estoy libre de culpa. Tengo opiniones como muchas otras personas, pero también tengo una visión más cercana de lo que ha ocurrido. Puedo decir, con una conciencia muy clara, que hasta ahora nunca he visto a nadie inyectarse o ingerir hormona del crecimiento humano o esteroides”, agregó.

Las personalidades de otros deportes ciertamente tomaron nota del escándalo del beisbol.

“¿Es un día negro? Creo que han ocurrido muchos días negros. Uno recuerda el escándalo de los Medias Negras, siempre han ocurrido esos momentos, y también uno recuerda el comienzo de la década de los 50’s, cuando el baloncesto universitario estaba lleno con tipos tramposos. Siempre ha pasado algo, como las drogas, los esteroides”, indicó el entrenador del Heat de Miami, de la NBA, Pat Riley.

Por su parte, Tony Dungy, el entrenador de los campeones del Super Bowl, los Potros de Indianápolis, dijo que todos se han manchado por las sustancias que ayudan a mejor el rendimiento deportivo.

“Siempre hay un impulso en el deporte, y quizás en la vida, de tomar ventaja. Seríamos ilusos si pensáramos que esas cosas no pasan y si algunos tipos no han intentado aprovecharse de diferentes maneras en todos los deportes. Creo que simplemente se trata de la naturaleza humana”, dijo Dungy.

“Estaría interesado en verlo (el informe) y ver algunas de las recomendaciones para ver qué podemos hacer para asegurarnos que esto no vuelva a ocurrir nuevamente en el beisbol y para asegurarnos que tampoco ocurra en nuestros deportes”, agregó Dungy.