Elementos de la Secretaría de Marina y de la Policía Federal participan en el rescate de damnificados de zonas populares de Villahermosa afectados por las inundaciones de los ríos Grijalva y Carrizal. (Agencias)
Pide el presidente a la ciudadanía que en la medida de sus posibilidades ayude en especie o en dinero a los damnificados.
El presidente Felipe Calderón hizo un llamado de solidaridad a los mexicanos para ayudar al estado de Tabasco, que vive una “verdadera situación de emergencia” por las lluvias de los últimos días que no cesan.
Por cadena nacional, el presidente de la República dijo que las precipitaciones han causado inundaciones en la mayor parte de la entidad, lo que ha afectado miles de tabasqueños.
“Es uno de los peores desastres naturales en la historia del país”, afirmó, al tiempo que pidió a los tabasqueños “que guarden la calma, que no se desalienten y que se coordinen con las autoridades”.
Calderón llamó a todos los mexicanos a socorrer a los habitantes de Tabasco, ya que “conocemos muy bien lo que significan las tragedias, porque las hemos sufrido en diferentes ocasiones”.
Pidió que, en la medida de sus posibilidades, los mexicanos ayuden en especie o en dinero a los damnificados.
“Algunos de los productos que hacen falta son agua embotellada, alimentos enlatados, colchonetas, cobertores, pañales desechables, toallas sanitarias, jabones, otros artículos de limpieza personal, biberones, medicinas”, indicó.
Igualmente, dijo, las autoridades tratan de conseguir lámparas de mano y baterías para las lámparas, sanitarios portátiles, plantas móviles de electricidad y potabilizadoras de agua.
El Ejecutivo federal señaló que la gente puede hacer llegar este apoyo a los centros de acopio instalados en varias ciudades del país y para quienes tengan dudas, sugirió a los interesados que se pongan en contacto con el sistema estatal de Protección Civil, con el DIF o la Cruz Roja de cada localidad.
En el caso de donaciones en efectivo, el presidente Calderón informó que pueden acudir al banco de preferencia, donde se han abierto cuentas especiales para recibir las aportaciones.
“Toda ayuda es valiosa sin importar lo modesta que sea la aportación”, señaló durante un breve mensaje de apenas cinco minutos.
Muere una persona
La corriente del río Grijalva ingresó por varios frentes a esta capital y con ello aumentó el saldo de afectados por las inundaciones en la entidad a un millón de personas y ya cobro su primera víctima, según reconoció el gobernador de Tabasco, Andrés Granier.
El gobernador reveló que alrededor de un millón de habitantes de Tabasco se encuentra bajo el agua, lo que representa casi la mitad de la población total del estado.
“De los 2 millones 100 mil que somos, no me queda duda de que probablemente más de un millón está en el agua”, afirmó en entrevista radiofónica con el periodista Joaquín López Dóriga.
Además explicó el primer deceso de un hombre en el barrio Gaviotas, en el sur de Villahermosa, quien murió ahogado cuando se volcó un vehículo en el que eran evacuadas varias familias.
Granier Melo dijo que durante la madrugada de ayer recibió una llamada del presidente Felipe Calderón, quien le confirmó que hoy viernes realizará una nueva visita a Villahermosa, si la suerte lo permite.
Un total de 670 localidades de los 17 municipios están inundadas por el desbordamiento de siete ríos, a causa de las fuertes lluvias que han azotado esta región desde hace más de una semana.
Las inundaciones empezaron la semana pasada por las fuertes lluvias que generó un frente frío, el cual provocó vientos de hasta 120 kilómetros por hora y fuertes mareas.
El Gobierno Federal decidió descargar agua de varias presas ubicadas en el vecino estado de Chiapas, ante el peligro de que rebasaran su capacidad máxima, lo que empeoró el caudal de los ríos que desembocan en Tabasco.
Por esta razón, los ríos Carrizal y Mezcalapa inundaron más áreas de Tabasco, mientras que en Villahermosa el nivel del agua del Grijalva, 1.78 metros por encima de su escala crítica, superó los diques construidos por el Ejército y causó la inundación de parte de la ciudad, en la que viven unas 300 mil personas.
Existen apenas 269 albergues en Tabasco, en los que son atendidas 29 mil 628 personas, razón por la cual las autoridades han pedido a los ciudadanos de casas donde no hay agua que cobijen a los afectados.
Ante el avance de las aguas en la capital, Granier emitió un mensaje por radio y televisión para pedir la evacuación de unos 5 mil ciudadanos que habitan en barrios sureños.
“Es necesario que salgan de sus casas porque la inundación es inevitable”, alertó el gobernador, quien ha dicho que al menos el 80% del estado está cubierto de agua.
En lanchas y helicópteros han sido evacuadas centenares de familias a lo largo del día, en escenas que recuerdan las inundaciones de Nueva Orleáns, Estados Unidos. Ayer el mandatario estatal señaló que “Nueva Orleáns le quedó chiquito a Villahermosa”.
Asimismo, se han trasladado a zonas seguras 10 mil 600 cabezas de ganado de Cunduacán, Nacajuca, Macuspana, Centro, Jonuta y Centla.
Mientras las cadenas de televisión regionales hablan de la desaparición de decenas de personas, en la capital del estado varias estaciones de radio dejaron de transmitir por problemas técnicos y las autopistas se encuentran cerradas.
Solamente funciona la carretera que une a Villahermosa con la ciudad de Coatzacoalcos, en el vecino estado de Veracruz.
Villahermosa, donde -según su alcaldía- 70 mil personas tienen sumergidas sus viviendas, vive escasez de agua, servicios bancarios, comerciales y hospitalarios.
Ayer se desencadenó un ambiente de incertidumbre entre los damnificados que se pelean por víveres y agua, y, desesperados hacen filas en las gasolineras para cargar sus vehículos de combustible, pues al menos tres de ellas dejaron de operar por estar entre el agua.
Lluvias en Chiapas afectan a 11 mil personas
Mientras tanto, 16 ríos y seis arroyos se encuentran desbordados en municipios del norte, centro y selva en 30 municipios de Chiapas, donde se reportan más de 11 mil personas afectadas en sus viviendas y patrimonios.
Los mayores estragos son provocados por el desbordamiento y las aguas de los ríos El Carrizal, Mezcalapa y Pichucalco, los cuales se expanden a municipios del vecino estado de Tabasco.
Personal de Ejército, la Secretaría de Marina y unidades de Protección Civil proporcionan refugio temporal a 2 mil 538 personas en albergues que fueron instalados en una docena de municipios.
Las inundaciones más severas se resienten en los municipios de Pichucalco, Reforma, Ostuacán, Estación Juárez, Sabanilla y Huitiupán, Rayón, Pantepec, Ocotepec, Solosuchiapa, Tapilula y Pueblo Nuevo.
Alerta Ssa por epidemias
La Secretaría de Salud reconoció que hay posibles riesgos de que en Tabasco se presente una “gran epidemia de dengue y cólera”, debido a la cantidad de agua acumulada y a la presencia de vectores transmisores.
“Por eso estamos preocupados”, aseguró Mauricio Hernández, subsecretario de Salud y Prevención, quien comentó que se han realizado compras de emergencia para desinfectar las zonas, debido a que el estado ya no contaba con insecticidas.
En conferencia de prensa, el funcionario de la Secretaría de Salud, señaló que entre la preocupación en materia de salud es el riesgo de tener epidemias gastrointestinales por el consumo de agua contaminada.
Sin embargo, aclaró que hasta el momento se tiene controlada esta situación.
VILLAHERMOSA, Tabasco
‘Nunca vinieron por nosotros’
Desde el lunes, cuando el agua rebasaba un metro en su casa, David Garrido Beltrán esperaba la ayuda del Ejército que había prometido ir a sacarlos de la zona inundada, en la colonia Cura Hueso, pero ésta nunca llegó.
Paciente, el martes comenzó a salvar algunas cosas que tenía en su hogar, papeles importantes y algo de ropa para salir en cuanto llegaran las lanchas de rescate.
Por la noche, el agua comenzó a subir sin cesar y, para el amanecer del miércoles, el nivel les llegaba literalmente “hasta el cuello”.
“Salimos en la lancha de un vecino que usa para pescar, la verdad estuvo muy lenta la ayuda que nos prometieron, nunca vinieron por nosotros, tuvimos que hacerle como pudimos”, relató con tristeza.
Con gran esfuerzo, David subió a la lancha a sus tres hijos, su esposa, sus suegros y la abuela de su mujer, de quien temían se lastimara o enfermara por su avanzada edad.
Él y otras personas se fueron a pie, guiando la embarcación, con temor de encontrarse algún lagarto o culebra de las que salieron del cauce de los ríos y habían visto nadando por las calles de la colonia.
Relató que por las noticias escuchó que los soldados y marinos iban a mandar lanchas para sacar sus cosas, pero no llegaron ni siquiera para sacarlos a ellos.
“No esperábamos que estuviera tan fuerte, nos agarró desprevenidos, nunca habíamos vivido una cosa así, en 1999 no se puso tan mal, y yo creo que esto se va a poner peor”, dijo David.
Las autoridades federales y estatales no trabajaron nunca en el desazolve de los ríos, acusó este padre de familia, hecho que no permitió que el río tuviera capacidad para soportar más agua de la normal.
De los 10 años que lleva viviendo en Cura Hueso, nunca fue testigo de trabajos de mantenimiento y conservación de los ríos Grijalva y Carrizal, que rodean a la ciudad.
Por si fuera poco, David criticó el mínimo apoyo que el Gobierno les ha ofrecido para recuperar su patrimonio, pues le prometieron 5 mil pesos por familia contra los 60 mil que calcula haber perdido por el desastre.
“Perdimos nuestra sala, refrigerador, muebles de cocina, todo eso ya se perdió.
“En mi colonia somos más de 3 mil personas afectadas y a un lado, en una colonia nueva que se llama La Gloria otros 4 mil y a todos cinco mil pesos se nos hace poco, simplemente hay que ver cuánto cuesta un refrigerador o un mueble, ni para eso alcanza”, reclamó David.
Además, espera no perder también su trabajo en un restaurante de Villahermosa, porque es el medio de sustento para los ocho miembros de su familia.
“Me pidieron que estuviera en contacto con ellos, pero la verdad no me quiero separar de mi familia con todo esto, espero que no me corran”, expresó con preocupación.
La esperanza de David es que el Gobierno les pague por ayudar en las labores de desazolve y recuperación de la ciudad.
“Nos dijeron que va a haber una cuadrilla que se encargue de limpieza, pero yo me imagino que van a organizar una especie de trabajo para poder ganarnos un poco de dinero”, dijo.