Las autoridades estatales deben vigilar el proceso de acopio del frijol en Durango, para evitar que se cpmentan abusos en contra de los productores, dijo el presidente del Comité Directivo Estatal del PRI, Ricardo López Pescador.
La intervención del gobernador Ismael Hernández Deras a fin de definir un precio piso para el frijol, demuestra que su gobierno se preocupa y ocupa del los problemas de los campesinos, consideró el presidente del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional, Ricardo López Pescador.
En este caso específico, el precio del frijol se fijó en $ 5.50 lo que viene incluido en el nuevo esquema de comercialización Primavera Verano 2007 en beneficio de los productores.
Dijo que de esta manera los productores de frijol se organizan para llevar el proceso de manera adecuada, para empezar a trasladar el grano a los centros de acopio previamente acreditados y que vayan a participar.
Destacó la intención de vigilar a los supuestos “coyotes”, quienes solo obligan a los campesinos a vender su producto a un precio menor a lo establecido, que además pueden entorpecer y ocasionar corrupción al proceso de comercialización establecido.
Añadió que se tiene contemplado que los agentes comercializadores que deseen acopiar el producto, deben demostrar solvencia económica para poder pagar en menos de ocho días establecidos a los productores, en caso que no cumplieron los acopiadores, tendrán que ser sancionados por las autoridades por la responsabilidad que les resulte.
López Pescador, precisó que uno de los objetivos es competir en el trato de libre comercio en el año 2008, cuando se abren las fronteras y competir con campesinos del extranjero, con la apertura de la planta beneficiadora, la cual apoyará a las personas del campo a vender el grano.
Consideró que las autoridades deben brindar los programas necesarios para competir en realidad con Canadá y la Unión Americana , en igualdad de posibilidades, sino esto traerá una crisis severa para el campo mexicano.
El dirigente estatal, pidió que el proceso de comercialización de la leguminosa sea vigilado por las autoridades, mediante diverso mecanismos que deben implementar Sagarpa en el menor tiempo posible y en ayuda a los productores.