Advierte el subsecretario de Estado norteamericano que la estancia en aquel país no será dos o tres años sino de más.
El subsecretario de Estado norteamericano para Asuntos Políticos, Nicholas Burns, dijo ayer que las fuerzas internacionales se quedarán “muchos años” más en Afganistán, y pidió el envío de más tropas europeas y mayor flexibilidad en su despliegue.
“Creo que es necesario un mayor número de tropas de Europa y un mayor grado de flexibilidad”, declaró Burns en una reunión con la prensa en la que pidió a “todos los Estados” que levanten las restricciones que impiden a sus fuerzas desplazarse fuera de su zona de operaciones en Afganistán.
Afganistán “es un lugar en el que tendremos que quedarnos a largo plazo...no es un esfuerzo de dos o tres años, y creo que seguiremos allí dentro de muchos años”, señaló.
La OTAN ha urgido a sus 26 países miembros que levanten esas restricciones y refuercen su presencia en Afganistán ante los crecientes ataques de los talibanes y de Al Qaeda, pero recibió pocas ofertas en su última reunión de ministros de Exteriores, celebrada en Sevilla en febrero pasado.
En lo que va del año han muerto unas 400 personas a causa de la violencia que sacude a Afganistán, una cifra que se suma a los cuatro mil 400, un millar de ellos civiles, fallecidos en 2006, el año más sangriento desde que los talibanes fueron desalojados del poder, en 2001.
La Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) en Afganistán de la OTAN, que desde 2003 opera bajo mandato de la ONU para estabilizar el país y permitir su reconstrucción, cuenta con unos 35 mil efectivos.
A la ISAF se suman los casi diez mil militares de la coalición “Libertad Duradera” liderada por EU, que tiene como misión perseguir a los terroristas de Al Qaeda y a los talibanes.
Burns recordó ayer que EU tiene desplegados en Afganistán unos 27 mil militares, repartidos entre ISAF y la coalición, y que recientemente pidió al Congreso mil 600 millones de dólares en ayudas a ese país durante los próximos dos años.
La Unión Europea (UE), que prepara el envío de una misión de formación de la Policía en Afganistán, es el principal donante de ayuda a Afganistán, con tres mil 700 millones de euros en los últimos cinco años.
“Estamos agradecidos por lo que ha hecho Europa y por los miles de soldados europeos que sirven allí”, afirmó Burns, quien expresó su especial agradecimiento a los canadienses, británicos, holandeses, estonios y rumanos desplegados en el sur y el este, las zonas más peligrosas.
El diplomático estadounidense subrayó el éxito de la ofensiva de primavera lanzada por la ISAF en el sur de Afganistán hace tres semanas, “que tomó por sorpresa” a los talibanes y les colocó en “desventaja”, aunque añadió que “podemos hacerlo incluso mejor”.
También subrayó la importancia de la colaboración de Pakistán, un país “clave” porque comparte una frontera montañosa con Afganistán por la que se infiltran los talibanes y otros grupos que atacan al Ejército afgano, a los civiles y a los soldados de la OTAN.
“En las últimas semanas hemos visto una mayor actividad por parte paquistaní y de las tribus locales pashtún contra los talibanes y Al Qaeda”, señaló Burns, aunque dijo que es necesaria una mayor colaboración y un “esfuerzo consistente” paquistaní.
