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México, DF.- El presidente de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (CNIV), Tony Kuri Alam, propuso la creación de un fondo del Gobierno Federal que sirva de aval en el otorgamiento de créditos bancarios baratos para el sector.
El directivo explicó que el fondo gubernamental garantizaría el pago del crédito y con eso “automáticamente” se abarata.
Acusó a la banca de “no servir de gran cosa” para la industria del vestido, la cual ha sido vetada por considerarla de alto riesgo, pues cuando un industrial del sector solicita un crédito “le exigen garantías de tres y cuatro a uno”.
Aseguró en entrevista que por lo anterior casi ningún industrial del vestido tiene crédito bancario, ya que “se financia con el proveedor, con los distribuidores; por eso hemos defendido tanto a los distribuidores de tela y de maquinaria”.
Sin embargo, aclaró que el crédito del proveedor se encarece al doble con respecto al bancario, porque ofrece un plazo mediano para su recuperación, además de que incluyen en ese proceso los intereses “que pueden ser mucho más altos”.
Para Kuri Alam, la industria del vestido podría crecer por lo menos el doble si es sujeta al crédito oportuno y barato, ya que éste “es caro y las garantías son peores”.
“A la industria del vestido desde hace tiempo la han visto como riesgosa, comentario general en el que todos se han dejado ir por el chisme. Esta industria es cada vez más fuerte. Las empresas que están trabajando han sorteado una serie de problemas, han remado contra la corriente y han brincado piedras en el camino”, argumentó.
Consideró que casi todos los negocios del sector necesitan financiamiento para adquirir maquinaria moderna, y en el caso de pequeñas o medianas empresas se requiere tecnología de punta, diseño y corte.
El presidente de la CNIV señaló que por falta de crédito el sector no creció en términos reales durante 2006, del que dependen unas 400 mil familias de manera directa, además de unas dos millones de personas en forma indirecta.
Dijo que si hubiera forma acudirían a la banca extranjera, pero sólo lo pueden hacer las grandes empresas. “Nosotros, para detonar el empleo y la producción necesitamos del crédito para las pequeñas y medianas empresas”, insistió.
El directivo ejemplificó que en Corea, para promover a sus industrias, la banca presta al 1.0 por ciento anual.
“Así no podemos competir. La falta de crédito y el costo, suponiendo que lo hubiera, es mucho mayor en México que el de nuestros competidores, que no son Estados Unidos y Canadá, sino países de Asia”, advirtió.