El relator especial de la ONU para la Libertad de Expresión, Ambeyi Ligabo, aseguró ayer que el secuestro del periodista italiano Daniele Mastrogiacomo y dos de sus colaboradores por parte de los talibanes reafirma la necesidad de garantizar el trabajo de la prensa en áreas de conflicto.
El contacto con Mastrogiacomo, quien trabaja para el diario La Repubblica, y dos traductores afganos se perdió el pasado día cuatro en la provincia de Helmand (sur de Afganistán).
El secuestro fue reivindicado posteriormente por los talibanes, que indicaron que lo estaban interrogando para saber si era un espía.
Ligabo hizo un llamamiento en favor de la “liberación inmediata e incondicional del reportero y sus ayudantes, así como de todos los profesionales de la prensa detenidos ilegalmente en el mundo”.
De Mastrogiacomo, el relator de la ONU destacó que se trata de “un distinguido periodista conocido por sus reportajes desde distintos zonas en conflicto, desde donde ha relatado la tragedia de la guerra, sus raíces y sus consecuencias, con imparcialidad, compasión y gran sentido de la responsabilidad profesional”.
Sostuvo que la importancia de la prensa al exponer los abusos contra los derechos humanos y el desprecio por el Estado de Derecho “está fuera de toda cuestión”, por lo que los ataques contra los periodistas impiden que éstos cumplan plenamente sus funciones.
Además, indicó que esos hechos también afectan a la libertad de expresión y los consiguientes derechos.