La síndica municipal, Yolanda de la Torre Valdez, considera que se debe revisar el reglamento que controla el ejercicio de la prostitución.
El Siglo de Durango
Se debe hacer un análisis del reglamento que regula la actividad de las sexoservidoras y así poder conocer a ciencia cierta si requiere modificaciones o adiciones, establece la síndica municipal, Yolanda de la Torre Valdez. “Tenemos que partir de la realidad social y transformarla a una realidad jurídica”, dice.
En los últimos días, diferentes actores políticos han opinado sobre la posibilidad de crear una zona de tolerancia; no obstante, la Secretaria General del Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido Revolucionario Institucional (PRI) señala que, en su caso, se enfocaría más al tema de la salud pública y mecanismos de control ligados a la prostitución.
Desde su punto de vista, es importante contar con los elementos suficientes, con indicadores sobre el tema del comercio sexual en la comunidad como, por ejemplo, tener bien identificados y controlados los lugares en los que opera.
“La legislación tiene que ir cambiando porque la realidad social avanza, eso es lo que hay que trabajar, requerimos un análisis y trabajo serio”, pronuncia la ex diputada local.
Menciona que no se deben dar propuestas que carezcan de sustento. “Hay que ver lo que funciona o no del reglamento, cuáles son las modificaciones que requiere, ésa es mi perspectiva, tengo una formación distinta, muy normativa”, glosa.
De la Torre Valdez alude que los integrantes del Cabildo son trabajadores de los ciudadanos y su deber es representarlos para que la programación de las acciones sea acorde con sus demandas.
Agrega que se debe partir del estudio de la actual normatividad y determinar si sigue vigente o no. En caso de que ya sea obsoleto, entonces se debe proceder a realizar las propuestas pertinentes pero con el suficiente soporte en el tema.
“Podemos analizar si provoca o no problemas de seguridad pública (el sexoservicio), esto debe ser un estudio serio”, insiste la Síndica Municipal.
Cabe mencionar que el Reglamento para el Control y Disminución de la Prostitución en el Municipio de Durango data de la administración municipal del petista Marco Cruz Martínez.
En ese tiempo, se determinó que “la prostitución es un fenómeno social que afecta a la comunidad, por eso el Municipio, que tiene como finalidades preservar la moral, la salud y el bienestar común, actuará para disminuir sus efectos y buscará su control”.
¿Sólo sueño?
Los principales objetivos del reglamento en materia de prostitución son:
-Regular y controlar el ejercicio de la prostitución y reducir sus efectos nocivos.
-Combatir la propagación de enfermedades transmisibles por contacto sexual.
-Establecer medidas de atención médica: preventiva, curativa o de rehabilitación.
-Controlar, orientar, prevenir, rehabilitar y vigilar el ejercicio de la prostitución, mediante campañas de asistencia social, promoción humana y educación para la salud y el trabajo.
-Coadyuvar en la modificación de los patrones socioculturales que promueven la prostitución.
-Determinar las obligaciones de los responsables de los lugares donde se ejerza la prostitución así como sus condiciones de higiene y salud.
-Establecer un control y registro real de los actores y los lugares en donde se ejerce la actividad.
FUENTE: Reglamento para el Control y Disminución de la Prostitución en el Municipio de Durango.
Sugieren analizar el problema
Por su parte, el director del DIF Estatal, Francisco Fournier Drew, comentó que es necesario que se forme un grupo de personas para que estudie el proyecto de la zona de tolerancia, para indicar qué beneficios traería ésta.
Dijo que se tiene que integrar un grupo que estudie dicho proyecto y que lo compare con otras zonas de tolerancia que existen en otros estados, es decir, identificar qué tan grave es el ejercicio del sexoservicio en la ciudad y si se tienen los controles de salubridad necesarios.
Fournier Drew manifestó que cuando fue funcionario de la Dirección Municipal de Salud Pública no se tenía la necesidad de instalar una zona de tolerancia porque existían los controles de salud necesarios; por ello, destacó que sería pertinente hacer un análisis profundo.
