EL SIGLO DE TORREÓN
CD. LERDO, DGO.- Aproximadamente 15 trabajadores del nuevo parque acuático Raymundo Beach, ubicado en la zona de toboganes del Parque Nacional Raymundo, en Lerdo, manifestaron ayer su inconformidad por la serie de “trabas” que se han puesto para la apertura de este lugar. Aseguran que son los principales afectados.
“Queremos que el Ayuntamiento nos escuche, que nos expliquen qué pasa, porque si hay algo mal no entendemos por qué hasta que ya está todo listo y a punto de abrir es cuando comienzan con esto”, dice Liliana González, quien está a cargo de los trabajadores del parque.
Benjamín Ruiz, encargado de dar mantenimiento al pasto, señala que desde hace 15 días contaba con lo que sería su primer sueldo y hasta ahora el único ingreso del que pensaba disponer inmediatamente. “No sólo afectan a los inversionistas sino a nosotros”.
Por su parte la cocinera, Mercedes López, pidió que “los dejen trabajar”, pues en su caso particular es el único sostén de su familia y la espera ha sido difícil. El salvavidas Rafael Pérez Castillo asegura: “Necesitamos trabajar, la situación económica está muy difícil sin ingreso, esto nos afecta directamente”.
La inconformidad se generó desde que CNA dio a conocer presuntas irregularidades en el proyecto de Cristian Colliere de la Marliere, por lo que podría reducirse el tamaño de la concesión, recibir una sanción o incluso ser revocada, todo por el presunto traslape de ciertas zonas de los terrenos federales además de que el Ayuntamiento anunció que “por ningún motivo” permitirá la apertura.
“Si lo que buscan es ecología no lo entiendo, porque antes el parque estaba que daba lástima y pena, deberían ver cómo está ahora, aquí no hay zonas de alto riesgo”, acotó María Esquivel, otra de las trabajadoras. Actualmente son cerca de 35 empleados los que no han percibido su salario en este tiempo.
Anteriormente
El Ayuntamiento dejó claro que su negativa a permitir el funcionamiento del parque no es con la finalidad de perjudicar a los empresarios pero que hay que esperar ante las dudas que surgen sobre si se ha hecho un uso correcto o no de la concesión.
“El Municipio no está en contra de las inversiones pero hagámoslo bien porque si surge un problema ahí ¿de quién sería la responsabilidad?, ¿de Cristian?, no, del alcalde. Por ningún motivo se permitirá que abra sus puertas, tenemos gente vigilando para que no se lleve a cabo esa apertura”, declaró el alcalde de Lerdo Antonio Olivas Ibarra.
