Los Pistones de Detroit se colocaron a un triunfo de la final de la Conferencia del Este en la NBA, luego de vencer anoche a los Toros de Chicago. (AP)
EFE
Chicago, Illinois.- No se dieron ni la reacción de los Bulls de Chicago ni el hundimiento de los Pistones de Detroit, que con el alero Tayshaun Prince de líder vencieron por 81-74 en el tercer partido de las semifinales de la Conferencia Este.
Con la victoria los Pistones quedaron con ventaja de 3-0 y tan sólo a una más de conseguir su pase a las finales por cuarto año consecutivo. El cuarto partido de la serie al mejor de siete se disputará el próximo domingo en el mismo escenario del United Center.
Prince, con 23 puntos, incluidos cuatro en último minuto del partido que aseguraron el triunfo, también aportó 11 rebotes con dos asistencias y volvió a ser el factor sorpresa que estableció la diferencia cuando los Pistones más lo necesitaban en el tercer cuarto.
Los Bulls, que habían dominado la primera parte con un parcial de 44-28, vieron cómo en el tercer periodo la figura de Prince, el base Chauncey Billups y el alero Rasheed Wallace surgieron para estar imparables y dieron la vuelta al marcador.
No se iba a repetir la historia del año pasado contra los Cavaliers, que les permitieron entrar en la eliminatoria después de tener ventaja de 2-0, y a pesar de estar con parciales adversos de 49-30 al comienzo del tercer periodo y 55-38 a la mitad del mismo cuarto, despertaron para ser de nuevo los “Bad Boys”.
Los Pistones, que no estaban teniendo su mejor noche en el apartado de ataque, ajustaron aún más su defensa y comenzaron a encestar para dejar un parcial de 32-17 que iba a ser insuperable por los Bulls.
El equipo de Chicago no sólo se puso por debajo en el marcador, sino que perdió toda la confianza de poder ganar a unos Pistones crecidos, que sentenciaron en el cuarto con un Billups imparable y más líder que nunca. Billups aportó 21 puntos, siete asistencias y cuatro rebotes, mientras que el escolta Richard Hamilton y Wallace, que fue el mejor en la primera parte, consiguieron 16 tantos cada uno.
Wallace fue decisivo en el apartado defensivo con 11 rebotes y cinco tapones después que el pivote Chris Webber tuvo su peor partido en lo que va de la fase final al irse en blanco con los cinco tiros a canasta fallados.
El escolta argentino Carlos Delfino jugó cinco minutos y también se fue en blanco, siendo el cuarto de su equipo que no encestó, dejando a los Pistones con sólo un 39.5 por ciento de acierto en los tiros de campo.
El alero sudanés Luol Deng con 21 puntos y 14 rebotes encabezó una lista de cuatro jugadores de los Bulls que anotaron en doble dígitos, pero de nuevo, como sucedió en los dos partidos anteriores, no pudieron superaron la barrera del 40 por ciento de acierto en los tiros de campo y se quedaron con sólo el 33.7.
El escolta Ben Gordon comenzó muy bien el partido, pero desapareció en la segunda parte y se quedó con sólo 16 puntos (cuatro de 16 tiros de campo, incluidos los tres triples que intentó), capturó seis rebotes y repartió tres asistencias.
Tampoco brilló en el ataque el base Kirk Hinrich, que se quedó con 13 puntos (seis de 15 en los tiros de campo, incluido uno de cinco triples), aunque capturó 11 rebotes y repartió siete asistencias.
Los hombres altos de los Bulls, el veterano P.J. Brown y el ex jugador de los Pistones, Ben Wallace, aportaron diez y cinco puntos con diez y 12 rebotes, respectivamente, pero al final tampoco pudieron ser factor en el ataque del equipo.
Los Bulls dominaron el juego bajo los aros con 60 rebotes por tan sólo 43 de los Pistones, pero generaron sólo 12 asistencias por 20 de los Pistones, que además perdieron sólo ocho balones por 12 de sus rivales.
Mientras que en el apartado de la recuperación de balón, los Pistones también fueron mejores con siete por sólo tres de los Bulls, que pusieron seis tapones por diez del equipo de Detroit.
A pesar del hundimiento que tuvieron en la segunda mitad del tercer periodo, los Bulls se mantuvieron en el partido hasta los dos últimos dos minutos del tiempo reglamentario cuando fallaron tiros de personal y triples decisivos.
El primero en hacerlo fue el alero argentino Andrés Nocioni, quien con 1:23 minuto para concluir el partido falló dos tiros de personal con el marcador en 76-71 y 31 segundos después tampoco acertó con un triple.
Ahí ya fue todo lo que concedieron los Pistones, porque el rebote fue para Prince que forzó la personal y anotó los dos tiros para el parcial de 78-71, algo que repitió en los últimos segundos con los dos últimos tantos del partido después que Billups también aportó una anotación con lanzamiento de tiro libre tras haber fallado el primero.
Los Pistones aseguraban una ventaja de 3-0 y que ningún equipo en la historia de la Asociación Nacional de Baloncesto (NBA) ha podido remontar en una serie al mejor de siete.