Felipe Calderón llega al primer año de su Gobierno con buenos números en las encuestas que aprueban su gestión. La respuesta de su Gobierno a la crisis en Tabasco, la prioridad que le ha dado al combate al narcotráfico, los acuerdos logrados con la LX Legislatura, los millones de pesos gastados en spots, finanzas estables y su política exterior, son algunas de las claves para entender sus índices de aprobación.
En cuanto a la política exterior, el fin de la “diplomacia a las carreras” y el regreso de los profesionales de la política exterior a la Cancillería han ayudado a que hoy México haya sacado del congelador a América Latina, particularmente con la normalización de las relaciones bilaterales con Cuba y Venezuela y con el fin de las tensiones heredadas de Vicente Fox con Argentina y Chile, pero con la creación de nuevas tensiones con nuestros vecinos centroamericanos, debido a las implicaciones de la llamada “Iniciativa Mérida”.
En el plano multilateral no ha habido mayores cambios respecto al sexenio pasado. Por el contrario, México ratificó recientemente su intención de volver a ocupar un asiento en el Consejo de Seguridad de la ONU para el bienio 2009-2010, pese a que algunas voces influyentes de la diplomacia mexicana mostraron su inconformidad o sus dudas respecto a ello, así como nuestra diplomacia sigue muy activa en otros foros multilaterales.
En cuanto a la relación diplomática más importante para México, que es la que mantenemos con Estados Unidos, el balance es mixto. Por un lado, con Estados Unidos se ha vuelto a abrir la “Caja de Pandora” al privilegiar el tema de la cooperación antinarcóticos. La negociación de la “Iniciativa Mérida” cuando el Congreso estadounidense se encuentra en manos de la Oposición demócrata y a un año de que Bush deje la Casa Blanca, le inyecta una dosis de política electoral demasiado alta a tal iniciativa, con el riesgo de regresar a los años noventa, en los que Estados Unidos evaluaba anualmente los esfuerzos antinarcotráfico del Gobierno mexicano, como ya advirtió la ex canciller Rosario Green recientemente.
Por el otro lado, la promesa que se hizo durante la campaña de Felipe Calderón de “desmigratizar” la agenda bilateral no ha sido cumplida del todo. La nueva ola de leyes antimigrantes que han aprobado en el 2007 los congresos locales de 41 estados en el país vecino, las campañas antimexicanas en algunos medios de comunicación conservadores estadounidenses y las declaraciones antimigrantes de algunos precandidatos a la Casa Blanca han servido para que el presidente Calderón se deje influir por quienes en Los Pinos están preocupados constantemente por las encuestas nacionales y para que desoiga a quienes saben que las declaraciones presidenciales ganan puntos en México, pero las pagan caro los mexicanos en Estados Unidos.
En cuanto a los personajes que este año han conformado el círculo de voces más influyentes en torno a la política exterior hay cuatro grupos. En primer lugar, el círculo de Los Pinos. La oficina de Juan Camilo Mouriño, quien dicen que se comporta como un consejero de Seguridad Nacional a la gringa con todo y una agenda propia de política exterior. En segundo lugar, el círculo de funcionarios de la Cancillería. Los subsecretarios que apoyan a la secretaria Patricia Espinosa, cuya labor ha sido discreta y eficiente, pero a quien muchos critican por lo que parece ser una falta de visión de estratega internacional. En tercer lugar, el círculo legislativo. La Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, encabezada por la senadora Rosario Green, cuya voz es muy respetada y oída en la Cancillería. Por último, por el círculo de Washington. El embajador Arturo Sarukhán, quien pese a su destacada labor durante la campaña calderonista y a su trabajo como representante de México en Estados Unidos, parece haber perdido influencia con el presidente.
En resumen, en política exterior ha habido un año de correcciones y de continuidad, pero sobre todo un año de reacomodos de influencias en los círculos de la diplomacia…
Miembro del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales
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