El líder del Partido Plataforma Ciudadana, Donald Tusk en compañía de su esposa Malgorzata (der.) saluda en la sede de su partido, en Varsovia (Polonia), durante la jornada electoral de ayer. (EFE)
El partido liberal Plataforma Ciudadana (PO) ganó las elecciones legislativas que ayer se celebraron en Polonia, poniendo con ello fin a dos años de controvertido Gobierno de Jaroslaw Kaczynski.
Según los resultados de los sondeos a pie de urna difundidos por la cadena de televisión pública TVP y aceptados por los dos grandes protagonistas de los comicios, el futuro primer ministro será el líder de PO, Donald Tusk, quien para muchos simboliza la esperanza de que Polonia se convertirá en un país verdaderamente europeo.
“Quiero agradecer a todos los que hoy han ayudado a elegir el mejor destino Polonia”, declaró Tusk en la sede de PO, mientras sus seguidores cantaban una típica canción polaca de felicitación y agitaban miles de banderas, dando rienda suelta a una emoción contenida por la larga espera.
Casi simultáneamente, el gran derrotado de la noche, afirmaba ante los suyos que “seremos una Oposición diferente de la que hemos tenido durante estos dos años de Gobierno, pero seremos fuertes y exigiremos a PO que cumpla todas sus promesas”.
Kczynski, pese el fracaso, recurrió al optimismo y aseguró que su partido ha doblado el número de votos en estas elecciones.
De nada le sirvió a Kaczynski la cruzada moral que durante sus dos años de Gobierno lideró contra la corrupción y los ex comunistas, pues la ciudadanía, al final, optó por el milagro económico que prometen los liberales, que aseguran van a revolucionar la economía y convertir Polonia en la nueva Irlanda.
Según TVP, PO habría obtenido un 43.7 por ciento de los votos, mientras que la formación conservadora Ley y Justicia (PiS) se habría quedado más de trece puntos por detrás de los liberales, con sólo un 30,4 por ciento.
La victoria atribuida a PO se produjo en unos comicios en los que se registró una participación récord en la corta historia democrática de este país, con un índice superior al 53 por ciento del electorado, aseguraron los primeros pronósticos adelantados por la cadena pública.
Los mismos resultados de las encuestas a pie de urna referidos por TVP, el tercer partido más votado fue la formación del ex presidente Aleksander Kwasniewski, Izquierda y Democracia (LiD), con un 13.3 por ciento. El cuarto lugar lo ocupó el Partido Campesino (PSL), de ideología conservadora, con un 8,4 por ciento.
Los electores polacos quisieron castigar a los dos partidos más radicales del panorama político polaco, protagonistas de múltiples escándalos a lo largo de la última legislatura, la ultracatólica Liga de las Familias Polacas y los populistas de Autodefensa, que se quedarían fuera del Parlamento con un 1.5 y un 1.4 por ciento respectivamente, lejos del 5 por ciento necesario.
Según las proyecciones de TVP, PO contaría con 224 escaños y no alcanzaría la mayoría absoluta, por lo que, como sucedió en la anterior Legislatura, volverán a ser necesarios pactos para poder gobernar, aunque aún es pronto aventurar quiénes podrán ser los futuros socios de Gobierno de los liberales.
PiS obtendría 156 escaños, pasando a ser el principal partido de la Oposición, mientras que Izquierda y Democracia tendría 53 escaños y el Partido Campesino 27, informó la cadena pública de televisión.
Todos los líderes políticos se congratularon del elevado número de votantes que acudieron hoy a las urnas, aunque esta alta participación fue también la causa de que el cierre de la jornada electoral se alargase angustiosamente durante tres horas, ya que algunos colegios se quedaron sin papeletas durante las votaciones debido a la falta de previsión de la Comisión Electoral Nacional.