Internacional Jeffrey Epstein Chile Israel-Palestina Donald Trump Narcotráfico

Ponen ciudades europeas el ejemplo en políticas climáticas

Ponen ciudades europeas el ejemplo en políticas climáticas

Ponen ciudades europeas el ejemplo en políticas climáticas

AP

Cuando Vaxjo, tranquila ciudad del sur de Suecia, decidió en 1996 dejar de usar combustibles fósiles, la mayor parte de la gente dudaba que su meta ambiciosa sobrepasara los límites municipales.

Unos años después, Vaxjo se ha convertido en una Meca para políticos, científicos y empresarios provenientes de lugares tan lejanos como Estados Unidos y Corea del Norte, que vienen atraídos por un programa que ha permitido reducir la emisiones de anhídrido carbónico en un 30% desde 1993.

Vaxjo es pionera en el creciente movimiento en las ciudades europeas, pequeñas y grandes, que no esperan una decisión nacional o internacional sobre mecanismos para reducir el calentamiento global.

Desde el cobro de cuotas en zonas de Londres para limitar el tránsito hasta el programa de uso de bicicletas en París, pasando por la campaña de energía solar en Barcelona, las iniciativas locales están produciendo resultados en todo el continente, muchas veces influyendo sobre las políticas nacionales.

“La gente suele preguntar: ¿No es mejor hacer esto a nivel nacional o internacional?”, dijo Henrik Johansson, contralor ambiental en Vaxjo, ciudad con 78 mil habitantes en las costas del lago Helga, rodeada de espesos pinos, en el corazón de la provincia de Smaland.

“Queremos demostrarle a todos que se puede lograr mucho al nivel local”, agregó.

La Unión Europea, consciente de que muchos estados miembros no cumplen con los controles de emisiones conforme al tratado contra el cambio climático de Kyoto, ha visto que la acción local ha llevado a varias ciudades a adoptar sus propias metas ecológicas. El bloque le dio este año uno de sus premios a la Energía Sustentable en Europa a Vaxjo, que busca reducir las emisiones en un 50% para el año 2010 y el 70% en el año 2025.

“Estamos convencidos que las ciudades son un elemento clave para cambiar conductas y lograr resultados”, dijo Pedro Ballesteros Torres, gerente de la campaña Energía Sustentable en Europa. “El cambio climático es un problema global, pero el problema es muy local”.

Hasta ahora, solamente unas cuantas capitales europeas han fijado blancos para emisiones, entre ellas Estocolmo, Copenhague y Londres. Torres dijo esperar que se pueda convencer a otras 30 ciudades a fijar metas propias el próximo año.

Aunque tales metas son recibidas con agrado, no siempre representan la mejor alternativa, dijo Simon Reddy, encargado del proyecto C40, red mundial de ciudades para intercambiar ideas sobre el combate al cambio climático.

“En la actualidad muchas ciudades no conocen sus niveles de emisiones, por lo que es muy difícil fijar metas”, dijo Reddy.

Todavía más importante que los límites a las emisiones, dijo, es que las ciudades preparen planes, delineando metas específicas para reducir emisiones, como usar combustibles alternativos en cierto porcentaje del sistema de transporte público.

El alcalde de Londres, Ken Livingstone, busca con su Plan de Acción Climática reducir en un 60% las emisiones de anhídrido carbónico en la ciudad para el año 2025, en comparación con los niveles de 1990. Sin embargo, los planificadores reconocen que sus metas no serán realizables a menos que el Gobierno imponga un sistema de “bonos de carbono”, incentivos a las empresas para reducir sus emisiones, con un valor fijo.

Barcelona, la segunda ciudad en importancia de España, desde 2006 obliga a todos los edificios nuevos y remodelados a instalar paneles solares para cubrir al menos en un 60% sus necesidades de energía para contar con agua caliente.

El proyecto ha sido imitado por decenas de ciudades españolas e inspiró una legislación nacional, con ideas similares, pero reglamentos más laxos, dijo Angels Codina Relat, de la Agencia de Energía de Barcelona.

No solamente son las ciudades europeas las que han emprendido acciones propias contra el cambio climático.

Varias ciudades de Estados Unidos, como Austin, Texas; Portland, Oregón, y Seattle han emprendido programas para reducir las emisiones de gases de efecto de invernadero. Bogotá redujo las emisiones del sistema de transporte municipal TransMilenio y construyó una amplia Red de caminos para bicicletas.

En Vaxjo, la mayor parte de las emisiones reducidas han sido logradas en la planta de energía y calor, la cual dejó de usar hidrocarburos y ahora se alimenta principalmente de aserrín y viruta de las madereras locales, y regresa las cenizas al bosque a fin de que nutran la tierra.

“Este es el mejor abeto de Suecia”, dijo el gerente de la planta, Ulf Johnsson, al mostrar un montón de residuos tomado de una enorme pila ante la instalación.

Aunque Vaxjo es pequeña, los miembros del C40, entre ellos la Ciudad de México, Nueva York y Tokio, se han sentido impresionados por sus logros y los presentan como un ejemplo para todo el mundo.

Leer más de Internacional

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Internacional

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Ponen ciudades europeas el ejemplo en políticas climáticas

Clasificados

ID: 309443

elsiglo.mx