Querida Secretaria:
La voz es una forma de expresión estética ante los demás. Es la forma de comunicación humana por excelencia y para muchos una importante herramienta de trabajo. Pero la voz tiene sus límites de uso según las capacidades personales y cómo se utilicen. Los profesores, los cantantes, los locutores, son los más vulnerables y los que padecen problemas de la voz con más frecuencia. Estos profesionales tienen un gran conocimiento del funcionamiento y manejo vocal.
En la actualidad ha habido un aumento de recursos para detectar y tratar problemas de la voz. Las siguientes recomendaciones son algunas buenas costumbres fáciles de llevar a la práctica para conseguir unas cuerdas vocales más sanas:
EVITA EL SONIDO AMBIENTAL
Cualquier situación que obligue a alzar la voz para comunicarse es dañina. Discotecas, bares, restaurantes, fiestas... perjudican seriamente la voz.
MANTÉN UNA BUENA HIDRATACIÓN
Es conveniente beber entre litro y medio y dos litros de líquido al día. Evitar la cafeína y el alcohol.
UTILIZA BIEN LOS RECURSOS
Hablar atropelladamente supone agotar el aire de los pulmones. A la larga produce tensión muscular dañando las cuerdas vocales.
RESPETA LAS HORAS DE SUEÑO
La voz es muy sensible a la falta de sueño. Dormir menos de seis horas produce cansancio y por consecuencia alteraciones vocales.
TRATA DE NO GRITAR
La tensión psicológica aumenta el grado de contracción de las cuerdas y genera lesiones.
EVITA LA TOS Y EL CARRASPEO
Toser con fuerza y carraspear para aclarar la voz son acciones traumáticas para las cuerdas vocales.
NO FUMES
El humo del tabaco es un poderoso enemigo, pues provoca irritación y sequedad.
BUENA SALUD, DIETA Y EJERCICIO
Un buen estado de salud general facilita mayor resistencia a los esfuerzos vocales. Una alimentación equilibrada y la práctica regular de ejercicio físico moderado aumentan la capacidad pulmonar. El aire es el elemento energético de la voz.
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