Querida Secretaria:
El sentirse confiada y tranquila en el manejo de las dinámicas sociales en la oficina, es un componente crítico para lograr el éxito en tus relaciones con los compañeros-hombres y mujeres.
Las dinámicas de género pueden confundir a cualquiera; especialmente a las jóvenes en el inicio de sus carreras. Muchas asistentes dicen que los intercambios con el sexo opuesto resultan confusos, ya que no hay reglas cuando se trata de acoso sexual o discriminación de género.
En este artículo se discutirá cómo debes integrarte en un ambiente de trabajo donde predominan los hombres; cómo establecer barreras –si es necesario- con los compañeros; cuáles aspectos de tu feminidad puedes desplegar en la oficina y cuáles no.
Trabajando en una empresa donde predominan los hombres es como trabajar con un grupo de gente diferente a ti. Esto quiere decir que debes tomar la iniciativa y pensar bien cómo relacionarte con ellos. No se trata de ser como ellos, sino de saber cómo integrarte en el grupo.
Parte de trabajar con personas del sexo opuesto resulta divertido, picaresco. Se cuentan chistes subidos de color, te preguntan acerca de tu vida personal. Esto puede ser pasable mientras no obstaculice tu desarrollo profesional. Es decir, que no dañe tu reputación, sea motivo de murmuraciones o te coloque en una posición comprometedora con tus compañeros o con tu jefe.
Otra situación muy común en el mundo laboral es el trabajar con hombres de diferente generación. Aunque esto parece un reto, con frecuencia no lo es, pues muchas veces se convierten en aliados de las jóvenes.
Por otra parte es una ventaja el ser mujer en este siglo XXI, ya que hay una gran apertura para que ella integre su feminidad en el mundo de los negocios. Esta integración consiste, en realidad, en aprender a cómo usar tu personalidad ventajosamente, pero debes ser cuidadosa acerca de no permitirte coquetear o seducir con tus acciones. Esta conducta tiene sus repercusiones en tu carrera. El saber cómo manejas las dinámicas hombre/mujer te ayudará a mantener relaciones positivas con tus compañeros y evitar el que caigas en las trampas que han frustrado a algunas mujeres en el pasado.
Las mujeres y los hombres aportan diferentes habilidades al trabajo. A las mujeres se les reconoce como más constructivas, muy buenas comunicadoras, mejores escuchas y más aptas para captar situaciones sociales. Todas estas habilidades las pueden colocar en un nivel muy alto en la oficina.
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