EL SALTO, P.N., DGO.- Incomoda a la ciudadanía la presencia de vagos y vándalos, sobre todo por la afición a las drogas de la mayoría y la necesidad de transitar por algunos escondidos y angostos callejones que resultan peligrosos y atractivos para robos u otro tipo de agresiones.
La Policía vigila y recorre las calles de la ciudad; sin embargo, los maleantes siempre esperan que la autoridad pase para hacer de las suyas, ya sea rayar las paredes, drogarse o hasta cometer robos o agresiones, manifestó un grupo de comerciantes del primer cuadro de la ciudad.
Leonor Batres, vecina de El Salto, manifestó que la presencia de la Policía ha aumentado, pero aún hay algunos lugares que resultan peligrosos, sobre todo algunos callejones y escalinatas por las que diariamente tienen que transitar niños estudiantes y empleadas, quienes son los más vulnerables.
Al ser cuestionada sobre el proyecto de vigilancia por medio de videocámaras, mencionó que implementar este sistema en El Salto sería de gran ayuda, ya que al colocar los aparatos en alto se tendría una mayor cobertura y, por ende, más seguridad.
En El Salto basta con observar las pintas en las bardas de domicilios y hasta monumentos para saber de la presencia de vándalos que son los principales causantes de riñas e involucrados en delitos de robos o agresiones.
Por otra parte, Seguridad Pública en conjunto con la Dirección Estatal de Investigación mantienen un operativo constante contra el narcomenudeo y los consumidores de drogas, así como una movilización intensiva durante los fines de semana, con la finalidad de evitar que en El Salto como en las localidades se susciten conflictos provocados por beodos o adictos.
