En la presente administración federal se ha planteado la urgente necesidad de que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) emprenda mejoras administrativas y operativas, porque la situación financiera del organismo es insostenible.
e acuerdo con el informe que el Consejo Técnico del IMSS elaboró en junio pasado para el Congreso de la Unión y el Ejecutivo federal, la situación financiera y los riesgos del instituto en el corto, mediano y largo plazos no es favorable.
Los retos como son dar atención médica a trabajadores en activo así como a pensionados y jubilados, maternidad y soportar el Régimen de Jubilados y Pensionados y otras obligaciones laborales representan una carga financiera que amenaza con ahogar al IMSS.
"De mantenerse la trayectoria financiera actual, a partir de 2008 los recursos del instituto no serían suficientes para hacer frente a las obligaciones con los derechohabientes y reservar recursos por un monto similar a 2007", asentó el informe.
El 7 de agosto pasado el director general del IMSS, Juan Molinar Horcasitas, advirtió lo anterior a empresarios estadounidenses, quienes generan 42 por ciento de los empleos directos e indirectos en México, y también ese día compareció ante diputados federales.
Al reunirse con los integrantes de la American Chamber México (Cámara de Comercio de Estados Unidos) informó que el IMSS tiene suficiencia financiera sólo por tres años debido a la grave situación por la que atraviesa.
El funcionario expuso que de no buscarse soluciones urgentes a la situación del instituto se tendrá que echar mano de sus reservas financieras, que son escasamente de 20 mil millones de pesos.
"Para garantizar la operación financiera del IMSS se necesitará que año con año, a partir de 2008, estas reservas incrementen poco más de 46 mil 366 millones de pesos hasta 2050 (...).
"Tres son los años de suficiencia financiera que tiene el IMSS si no forma reservas en los próximos años, es decir si se ocupa sólo de su presente que de su futuro", explicó.
En tanto, al comparecer ante la Comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados propuso a los legisladores ayudar a resolver las deficiencias que persisten en la operación del organismo, porque afectan sus finanzas en el rubro de pensiones y del seguro de enfermedades y maternidad.
Hay tres rubros que presionan la situación financiera y constituyen riesgos para el IMSS, entre ellos insuficiencia de camas, menos de una cama por cada 100 mil derechohabientes.
Lo anterior cuando el estándar mínimo internacional es de una cama por cada 100 mil habitantes, así como de consultorios; además hay un déficit actuarial en su operación y el monto de sus reservas.
En el informe se reconoce que debido al rezago de inversión en infraestructura médica, así como a la falta de inyección de capital en algunas regiones del país, "ocurre una privatización de facto, cuando el derechohabiente acude a servicios privados al no encontrar en el instituto respuesta eficaz".
Molinar Horcasitas afirmó que el IMSS es de los trabajadores y dentro de las estrategias propuestas para sanear las finanzas del instituto no se prevé, de ninguna manera, la privatización.
También indicó, con relación al Régimen de Pensiones y Jubilaciones de la institución, que la reforma de 1997 permitió resolver el problema de las pensiones, al ampliar la edad mínima de retiro y aumentar los porcentajes de aportación.
No obstante, advirtió la necesidad de que el Congreso de la Unión analice la posibilidad de mejorar la tasa de reemplazo de los trabajadores y el esquema de ahorro, para al final de su vida laboral incrementar su pensión.
Sobre si funcionó o no el cambio al sistema de pensiones hecho en la pasada administración federal dijo que sirvió "sólo para detener la sangría a las finanzas, nunca fue visto como panacea, sino como un remedio, y en ese sentido ha funcionado".
"Se quedó corto, pero tenemos un sistema de pensiones debidamente fondeado que garantiza el pago a los jubilados, pero debemos mejorarlo por medio del sistema de ahorro para el retiro", aseveró.
Molinar Horcasitas reiteró que la solución a los problemas económicos del IMSS depende de las decisiones que tome la Cámara de Diputados, y resaltó que ni él ni el presidente Felipe Calderón han considerado proponer la privatización del Seguro Social.
"Yo nunca he pensado en ello, jamás. Es mi más firme convicción y la del presidente", destacó.
