Los Rabanes. (AP)
CIUDAD DE PANAMÁ.- La banda panameña de rock Los Rabanes, ganadora de un Grammy Latino por su compacto Kamikaze, alista maletas para una próxima gira a Centroamérica y Estados Unidos, dijeron sus integrantes.
Nada más recibir su primer Grammy Latino en la categoría Mejor Álbum de Rock Vocal o Dúo el jueves pasado, Los Rabanes, integrado por Emilio Regueira (voz-guitarra), Christian Torres (bajo-coro) y Javier Saavedra (batería) recibieron la noticia de su sello discográfico (Universal Music) de un plan masivo de promoción.
Christian Torres dijo que con este reconocimiento de “alto calibre” recibido con el Grammy, en adelante se abrirán más las puertas para el grupo “en todos los mercados” y los medios especializados van a tomarlos “mucho más en cuenta a partir de este momento”.
El sábado pasado tocaron en El Salvador, un día después de celebrar el premio con su familia, amigos y simpatizantes en la ciudad de Chitré, capital de la provincia central panameña de Herrera, de donde son originarios.
El grupo visitará Puerto Rico el sábado próximo durante un festival de rock.
Los jóvenes músicos informaron que también organizan una gira para cerrar 2007 por Centroamérica, que terminará con presentaciones en Costa Rica del 17 al 23 de diciembre próximo y otra por varias ciudades estadounidenses entre marzo y abril de 2008.
A Los Rabanes, el Grammy les ha valido varios reconocimientos, como el recibido ayer de la Alcaldía de Panamá, que les entregó las Llaves de la Ciudad, distinción que también les hará el ayuntamiento de Chitré, el jueves próximo.
Torres añadió que el primer síntoma del reconocimiento a su trabajo fue que al día siguiente de ganar el Grammy, su sello discográfico les dijo que debían hacer “un trabajo organizado de promoción en los próximos meses”.
Además, reconoció que con el premio existe ahora un compromiso: “obviamente los ojos ahora están mucho más puestos en nosotros (...) y tienes qué demostrar que te lo ganaste por algo”.
Destacó el apoyo que la banda ha recibido del público: “nos sigue porque quizá somos muy irreverentes, muy locos, muy fiesteros y nuestros espectáculos tienen qué ver precisamente con este mismo estilo de vida, con el free style y con todos esos movimientos”.
Torres reconoció que algunas cosas pueden variar y quizá un nuevo público que se anexe: “ya no nos va a estar viendo como una banda del relajo, sino como una con un carácter más musical, porque es lo que implica ganarse un reconocimiento de esta magnitud”.
Sin embargo, el bajista y coro de Los Rabanes, a quien se le conoce también como “el maestro pipón”, afirmó que el grupo seguirá siendo irreverente, pero siempre va a estar cuidando “la calidad” porque, agrega, “es lo que quiere la gente”.
En sus diez años de carrera musical y con siete álbumes publicados, los Rabanes han trabajado la fusión musical de diversos ritmos como el hip-hop, el calipso, el haitiano y añadiendo también elementos exóticos que no tienen qué ver directamente con el rock.
El álbum Kamikaze es visto por Los Rabanes como un renacimiento pues está centrado en las raíces de la agrupación, enteramente tocado por los tres y sin contratar músicos extras para añadir otros sonidos, explicó Torres.