Una gran recepción fue brindada para el estelar refuerzo mexicano del Deportivo La Coruña del futbol español, Andrés Guardado, en quien se cifran grandes esperanzas para ayudar a su nuevo club a llegar a nuevas alturas. (EFE)
El joven refuerzo, consciente de su compromiso con el equipo, llega dispuesto a triunfar.
La Coruña, España.- El sueño del mexicano Andrés Guardado se hizo realidad tras ser presentado de manera oficial como jugador del Deportivo La Coruña de España, y en su primer día como integrante del equipo prometió entrega y espera cumplir con las expectativas.
En conferencia de prensa, el presidente del equipo, Augusto Lendoiro, hizo oficial la llegada de Andrés Guardado, por quien pagaron a los Rojinegros del Atlas más de seis millones de dólares por el 75 por ciento de su pase.
Asombrado por el recibimiento que tuvo, el joven de 20 años de edad se mostró agradecido con el club que le brindó la oportunidad de llegar al balompié europeo, donde espera, junto al equipo, cumplir sus objetivos.
“Sé que hace tiempo que no se hace una (presentación) así en el Deportivo La Coruña. Espero cumplir las expectativas. Soy joven y vengo a dar lo mejor de mí, y espero que tanto el equipo como yo vayamos creciendo juntos”, declaró el mediocampista.
Llegar a un club como el “Depor” como el fichaje estrella de la temporada alegra al jugador, pero al mismo tiempo le da responsabilidad que debe asumir, y lo hace consciente, “tengo un compromiso con el club que me ha dado esta oportunidad”.
El seleccionado mexicano, quien se caracteriza por su disparo de larga distancia y su entrega en el terreno de juego, señaló que por ahora no piensa en usar al Deportivo como un trampolín para brincar a uno de los equipos “grandes” de Europa.
“Estoy pensando únicamente en el Deportivo porque es el que me abrió las puertas”, aclaró el jugador, quien desea triunfar con el cuadro gallego, consolidarse en el equipo y convertirse en un referente para el “Depor”.
Aconsejado por sus compatriotas Rafael Márquez y Gerardo Torrado para emigrar al balompié español, el futbolista, con dos años como profesional, manifestó que llega a aportar su granito de arena, en espera de formar un buen grupo y con sus compañeros obtener logros importantes.
Minutos después, Andrés Guardado se enfundó en su nuevo uniforme y saltó a la cancha del Riazor, donde más de tres mil aficionados se dieron cita para observar a la nueva estrella del equipo y quien ha despertado mucha expectación en la ciudad.
El jugador, quien tiene una cláusula de rescisión cercana a los 35 millones de dólares, dio sus primeros autógrafos como jugador del Deportivo, ante una afición que se le entregó en su primer día como refuerzo.