El presidente de Israel, Moshe Katsav grita durante una conferencia de prensa en su residencia de Jerusalén. (AP)
El presidente saliente de Israel, Moshe Katsav, se declaró hoy culpable de los cargos de violación y acoso sexual que pesaban en su contra para evitar la prisión, pero que lo obliga a abandonar el cargo.
El acuerdo, que minimiza el daño causado a la figura presidencial por Katsav, fue dado a conocer este jueves en conferencia de prensa por el fiscal general de Israel, Menachem Mazuz, quien estimó que la situación fue de interés público.
'Este acuerdo minimiza el daño a la institución presidencial.
Era importante que Israel se librara de ver a un presidente enfrentando un juicio', dijo el fiscal general, al considerar que este hecho impulsará a las víctimas de abuso sexual a denunciar tales crímenes.
Katsav, quien insistía en su inocencia y se negaba a abandonar la presidencia de manera oficial, -ya que sólo solicitó un permiso de ausencia en enero pasado-, firmó este jueves ante las autoridades el acuerdo que le evitará la prisión, precisó Mazuz ante la prensa.
'El presidente se declarará culpable de tres cargos y recibirá una sentencia suspendida, además deberá pagar una compensación a las demandantes', dijo el fiscal general, tras precisar que los tres delitos son violación, acoso sexual y acoso de un testigo.
Por el acuerdo, el mandatario deberá presentar mañana viernes su dimisión a la portavoz de la Knesset (parlamento israelí), Dalia Itzik, a fin de que ésta entre en efecto 48 horas más tarde, explicó Mazuz citado por la página web del diario local Haaretz.
Katsav será sustituido por Itzik, quien se desempeña como presidenta en funciones desde que el mandatario se retiró por un permiso, y que detentará el cargo hasta el próximo 15 de julio, cuando de manera oficial lo ocupará el presidente electo, Shimon Peres.
La Corte de Magistrados de Jerusalén emitirá la sentencia oficial contra Katsav el próximo domingo, una vez que entre en efecto su dimisión y quede sin fuero, en un hecho que, según el fiscal general, afectará por siempre la imagen pública del político.
El mandatario de Israel fue acusado de violar en dos ocasiones a una ex empleada del Ministerio de Turismo, cuando él era titular de esa cartera, y de haberla tocado sin su consentimiento en otras ocasiones, lo que es considerado 'abuso indecente'.
Katdav también enfrentó cargos de acoso sexual de otras dos empleadas de la oficina presidencial, aunque sólo una de esas dos demandas será aceptada por el aún mandatario en el acuerdo que le evitará pasar tiempo en prisión.
