Los habitantes de un pueblo andino de Bolivia atacaron a un grupo de policías que participaba en una operación contra el contrabando en la zona y causaron heridas de gravedad a dos agentes, informaron ayer fuentes oficiales.
El capitán Juan Carlos Apaza, del comando general de la Policía boliviana, detalló que los dos agentes permanecen hospitalizados, con heridas provocadas por piedras, palos y golpes de puño.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del sábado en la población de Escoma, cerca de la frontera con Perú, cuando un contingente de entre 40 y 50 policías se desplazó hasta esa localidad para incautar varias mercancías de contrabando.
Según Apaza, los agentes encontraron un camión con decenas de garrafas de gas y gasóleo destinados al contrabando, cuyo conductor se dio a la fuga y empezó a movilizar a los habitantes del lugar asegurando que los policías eran unos “maleantes”.
Los oficiales fueron acorralados por los lugareños en la plaza principal de Escoma y, tras usar gases lacrimógenos para intentar persuadir a sus atacantes, decidieron huir para evitar un enfrentamiento mayor.
Los dos agentes heridos fueron secuestrados durante varias horas por los habitantes de Escoma, señaló Apaza. El contrabando de todo tipo de productos a pequeña escala es una práctica muy habitual en Bolivia.
