César Villaluz de México (izq.) y Claudio Yacob de Argentina disputan el balón en un juego muy cerrado el cual gano la alvicesleste por 1-0. (Fotografías de AP)
Argentina termina con sueño de ‘Tri’ sub-20 de buscar el título del Mundial.
Ottawa, CANADÁ.- Argentina tomó la delantera sobre México cuando expiraba el primer tiempo, similar a lo vivido en la Copa América de Venezuela entre los representativos mayores de estos equipos, y el Tricolor no logró responder para quedar eliminado de la Copa Mundial Sub-20.
La solitaria anotación del juego, disputado en el Estadio Frank Clair de esta ciudad, se registró a los 45 minutos y fue marcado por Maximiliano Moralez, con la fortuna de que su tiro fue desviado por el defensa Julio César Domínguez cuando el arquero Alfonso Blanco parecía que alcanzaría el balón.
Acabó así entonces el sueño de esta generación de jugadores mexicanos por repetir la conquista de la Copa del Mundo, como lo había hecho en el Mundial Sub-17 en Perú en 2005. Los pamperos, por su parte, siguen vivos y enfrentarán a Chile, que dejó fuera a Nigeria 4-0, en las semifinales.
Cuando el nerviosismo inicial de los mexicanos parecía controlado, un error abrió las puertas para que el rival se fuera al frente en el marcador.
En jugada donde la fortuna abandonó al cuadro de Jesús Ramírez pues cuando parecía evitaría daño en su meta un ligero desvío permitió que el tiro no pudiera ser desviado por Blanco.
La albiceleste pareció encontrar el talón de Aquiles del Tricolor cuando se fue adelante en el juego, pues ya con la mitad del tiempo por disputarse y con una férrea defensa cerró los caminos a un equipo que por primera vez se vio abajo en el marcador y no tuvo capacidad de reacción.
Tampoco llegó la revancha que los aficionados mexicanos esperaban sobre los sudamericanos, luego de la eliminación en semifinales en la Copa América de Venezuela.
Fiel a su costumbre, el cuadro mexicano se mostró nervioso los primeros minutos, lo que se reflejó en un rebanón del zaguero central Julio César Domínguez, donde el arquero Alfonso Blanco tuvo que intervenir para evitar que Moralez pudiera tirar al arco.
Permitió el Tricolor que los sudamericanos tomaran el control del balón, aunque no lograron aprovechar esos instantes de descontrol. Blanco mandó a tiro de esquina por encima un primer obús de Ángel di María a los tres minutos.
Conforme el tiempo avanzó, el representativo azteca se asentó en el campo para empezar a fabricar algunas opciones sobre la meta defendida por Sergio Romero, quien a los 13 minutos salvó con el talón que un disparo de Carlos Vela, que ya había pasado entre sus piernas, se fuera al fondo.
La prueba de que México había nivelado el juego fue una genialidad del mismo Vela, quien con la marca pegajosa de Matías Cahais cubrió el balón, se dio la media vuelta y sacó rápido zurdazo que se estrelló en el poste izquierdo.
El Tri jugaba ya mejor que la albiceleste sólo que no lograba colocarse al frente en el pizarrón, mientras a la defensiva los mexicanos ya se habían asentado y nulificaban cualquier arribo hacia su área.
Entonces vino un error del zaguero Héctor Moreno, quien arriesgó de más un balón en la salida y permitió que Pablo Piatti lo robara para armar una acción. Piatti cedió fuera del área hacia Moralez, quien entró por el centro al área y sacó disparo hacia la derecha y Julio César Domínguez cambió la trayectoria en su afán por desviar para el tanto argentino.
Fue similar a lo ocurrido a media semana en la Copa América de Venezuela, pues agonizaba el primer tiempo cuando se registró este gol, que ofreció entonces una prueba interesante al cuadro tricolor, con 45 minutos por delante, porque fue la primera ocasión en este torneo en que se fue abajo en el tanteador.
Pero la reacción mexicana nunca llegó, pese a que el técnico Jesús Ramírez hizo tres movimientos para buscar variantes e incluso cambió de línea de cinco al fondo a cuatro para adelantar sus líneas.
México no pudo sentirse cómodo nunca más en el partido, pues, obligado a ir al frente, cayó en desesperación y dejó huecos en zona baja, sin que esto propiciara mucho peligro sobre su portería.
Argentina impuso sus condiciones en el complemento, colocó dos líneas de cuatro para complicar el tránsito del esférico a los mexicanos, que quisieron atacar casi todo el tiempo por el centro, se olvidaron de las bandas y facilitaron el trabajo a los sudamericanos.
El choque se volvió demasiado trabado y entonces aparecieron las tarjetas amarillas por uno y otro bando. Giovanni Dos Santos no tuvo el balón en sus botines para crear peligro, César Villaluz mostró empeño pero se estrelló una y otra vez en la muralla pampera y Vela, quien había tenido las dos más claras, fue sacado del juego.
Al final, el Tri cargó con su primera derrota en el Campeonato Mundial Juvenil de Futbol Canadá 2007 y ni siquiera las cuatro victorias en fila con las que llegó lo salvaron de quedar eliminado.
Jesús Ramírez arremete contra el arbitraje
Jesús Ramírez reclamó la incapacidad de los árbitros para mantener el mensaje del Fair Play en el Mundial Sub-20. Era algo que tenía guardado desde hace unos partidos y que explotó con la amargura de la derrota.
“Fair Play es un bonito slogan, pero nada más eso”, dijo molesto el entrenador de México luego del partido ante Argentina en el que a su entender, el árbitro Alberto Undiano no cumplió al pie de la letra el reglamento de juego.
Luego corrigió y dijo que los errores arbitrales contra México “no fueron solamente en el partido de hoy, esto sólo fue el epílogo”.
Descargado el coraje contra el silbante español y los demás que le tocaron a México, Ramírez felicitó a Argentina por su pase a las semifinales del torneo, “les deseo lo mejor porque aparte tengo una bonita amistad con Hugo Tocalli”.
Pero sobre todo, el estratega del Tricolor dirigió unas palabras de felicitación a su equipo, “estoy orgulloso de este grupo, porque se entregó al máximo, pero desafortunadamente no cayó el gol”.
Ramírez se despidió de la generación que dirigió desde el 2002 con un mensaje positivo: “fue un proceso muy exitoso porque se obtuvieron cosas importantes y sé que en un futuro muchos de estos jugadores estarán en la selección mayor”.
La explicación del entrenador mexicano a lo ocurrido en la cancha fue simple, sin rodeos: “perdimos el partido por no ser capaces de generar otra cosa”.
Unos segundos después agregaría: “cometimos un grave error y después no logramos emparejarlo. Como siempre, el equipo entregó todo en la cancha. Me duele perder de la manera en que lo hicimos (con un error de concentración), pero me voy satisfecho viendo un grupo que camina hacia delante”, explicó el estratega.