Los factores que han frenado el combate a la violencia contra la mujer son la cultura del machismo y falta de educación para denunciar las agresiones, aseveró la diputada Gloria Martínez Castañola.
A los diputados locales no les alcanzó el tiempo para legislar sobre la violencia contra las féminas
Pese a los altos índices de violencia contra las mujeres en Durango, a los diputados del Congreso del Estado no les alcanzó el tiempo para legislar a nivel local sobre la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia aprobada en el Senado desde enero del presente año.
Incluso, esta Ley federal se publicó en el Diario Oficial de la Federación el 1 de febrero del presente año y algunos Congresos de los estados alcanzaron a legislar, entre ellos Monterrey, admitió la diputada y presidenta de la Comisión de Equidad y Género del Congreso local, Gloria Martínez Castañola.
Y es que según la Segunda Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (Hendire) dada a conocer INEGI, en Durango, siete de cada diez mujeres mayores de 15 años han sido violentadas por su pareja, en la escuela, trabajo o en su familia.
Esto le valió al estado ubicarse en sexto lugar a nivel nacional pues también mantiene registros de violencia por algún tipo de acto u omisión que cause daño o sufrimiento físico, emocional, económico o sexual.
En ese sentido, Martínez Castañola justificó que se estuvo analizando la ley federal, pero no se abordó en el Legislativo porque no se quería aprobar al vapor y no se pusieron de acuerdo con instituciones como DIF e Instituto de la Mujer Duranguense (IMD), al ser necesario realizar varios foros de consulta.
Por ello, los diputados de la próxima legislatura tendrán que realizar el trabajo que los actuales no hicieron a fin de contar con más herramientas legislativas para acabar con este fenómeno social que afecta a los hogares duranguenses.
La legisladora del Partido Acción Nacional (PAN) reconoció que entre otros factores que han frenado el combate a la violencia contra la mujer están la cultura del machismo y falta de educación para denunciar, por lo cual aún falta mucho por hacer, pese al avance que se ha tenido.
Señaló que las mujeres se callan la violencia que sufren de sus parejas al interior de sus hogares y diferentes sitios, por la falta de cultura de la denuncia y porque se ha convertido en parte del machismo.
A nivel nacional, el porcentaje de mujeres maltratadas es del 67, siendo las entidades en las que más ocurre esta situación Jalisco, con 78.5 por ciento; estado de México, con 78.2; Distrito Federal, con 76.8; Colima, con 71.3; Aguascalientes, con 70.6; y en el sexto lugar aparece Durango, con 70.1.
La Hendire calificó como violencia “el sometimiento, discriminación y control que se ejerce sobre las mujeres en todos los ámbitos de su vida, afectando su libertad, dignidad, seguridad e intimidad, violentando así el ejercicio de sus derechos”, de la misma manera en como aparece en la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre sin Violencia.
Vida libre
Según la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia aprobada por el Senado, el objetivo es prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres, además de garantizar su acceso a una vida libre de agresión para su desarrollo y bienestar.
Indica que la Federación, estados y municipios deberán coordinarse para diseñar instrumentos, políticas, servicios y acciones para garantizar lo establecido en esta legislación. Esta ley será garantizada a partir de la integración de un Sistema Nacional, en el cual participarán, entre otros, los titulares de las secretarías de Gobernación, Desarrollo Social, Seguridad Pública, Procuraduría General de la República, Educación y Salud.
También lo conformarán el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, el DIF y el Instituto Nacional de las Mujeres, el cual ocupará la Secretaría Ejecutiva del Sistema.
Establece que el Ejecutivo federal propondrá en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación una partida para el Sistema y los programas a aplicar, además de que emitirá el Reglamento de la ley dentro de los 90 días posteriores a su publicación.