No soy crítico de cine, ni pretendo serlo; pero el próximo viernes 15 del presente, nuevamente Dreamworks y Cinépolis nos darán la oportunidad de volver a ser niños y adultos al mismo tiempo con el estreno nacional de la cinta de dibujos animados “Shrek Tercero”.
Dicha película; promete ser la más taquillera del verano a nivel mundial; ya que en tan sólo su primera semana de estreno en los Estados Unidos recaudó 122 millones de dólares contra los sólo 28 millones y medio de dólares del “El Hombre Araña 3”. Por otra parte, la tendencia pinta bien, ya que “Shrek 2” la predecesora de “Shrek Tercero recaudó en su primera semana 108 millones contra los 122 mdd. de su versión actual.
De hecho “Shrek Tercero” se ubicó ya en tercer lugar histórico de recaudación sólo después de "El Hombre Araña", que superó los 150 millones de dólares en su estreno y con "Piratas del Caribe" que alcanzó más de 135 millones.
“Shrek Tercero” será otro gran éxito de exhibición para la cadena Cinépolis, que de hecho, utiliza el gorro del personaje de Shrek como acento sobre la “e” de Cinépolis. De hecho, hoy en día; sin distribución no hay cine y sin cine puede haber distribución. ¿A qué me refiero?...
Por ejemplo para DreamWorks/Paramount (los creadores de Shrek), la presencia de Cinépolis en la distribución y exhibición de Shrek Tercero no es determinate....es indispensable y absolutamente necesaria; ya que Cinépolis, con sus 1,465 salas en 170 conjuntos representa a la cadena de exhibición cinematográfica más grande de América Latina y la quinta más grande a nivel mundial. Con presencia en México en 56 ciudades de 28 estados del país y salas en Guatemala, El Salvador, Costa Rica y Panamá para totalizar más de 296,800 butacas y un ritmo de crecimiento anual promedio de 150 pantallas; que no se exhiba una película es Cinépolis es simple y sencillamente un error. Sin embargo una película mala (que no es el caso de Shrek) con la distribución de adecuada puede hacerse buena económicamente hablando.
Cinépolis forma parte de Organización Ramírez; hoy en día todo un emporio comercial y de medios que tuvo sus orígenes en 1947 cuando el licenciando Enrique Ramírez Miguel inaugura el cine “Morelos” en Morelia Mich. Hoy en día, Organización Ramírez no sólo maneja cines sino tiene una división inmobiliaria con hoteles, centros comerciales y centros de entretenimiento además de una división automotriz con agencias de las marcas Ford, Mercedes Benz y Mazda y son socios del periódico “Provincia” en Michoacán; sin embargo y dado el tamaño de Cinépolis; esta última empresa represente entre el 80 por ciento y 85 por ciento de las utilidades.
Hoy en día, Organización Ramírez y Cinépolis; son dirigidas por Alejandro Ramírez; quién muestra que una empresa familiar sí puede trascender más allá de la primera generación (él representa a la tercera) y que la educación formal y la experiencia previa fuera del nicho familiar son necesarias para dirigir mejor los destinos la empresa creada por padres o abuelos.
Alejandro Ramírez estudió la licenciatura en Economía y obtuvo el grado de Maestro en Administración de Empresas por la Universidad de Harvard, tiene una segunda maestría en Desarrollo Económico por la Universidad de Oxford y es candidato a doctor en Economía por la Universidad de Cambridge. Ya con tan sólo ese currículum; va diciendo que se está para grandes cosas. En cuanto a experiencia profesional; trabajó en el Banco Mundial; también fue Secretario Técnico del Gabinete de Desarrollo Humano de la Presidencia de la República y representante de México ante la OCDE en París. Fue nombrado “Joven Líder Global” por el Foro Económico de Davos, Suiza.
Cómo podrá verse, el perfil es muy distinto al del típico sucesor de una empresa familar en el que termina una carrera profesional, no toma experiencia externa y menos actualización académica posterior a la licenciatura.
Así pues; la exhibición de Shrek Tercero representará un éxito más en la larga lista de películas de temporada exhibidas pero siempre que usted se sorprenda sobre cuánto gana un actor por participar en una cinta, observe que el actor es sólo un empleado y si eso ganan los empleados....imagínese cuánto ganan los dueños. Definitivamente el negocio está en la empresa no en la actuada.
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