MÉXICO, DF.- Aunque se presentó como una reforma a la línea del Partido de la Revolución Democrática, la mesa de “Línea Política” de su congreso nacional aprobó ayer ratificar el desconocimiento del presidente Felipe Calderón e impulsar por otro lado las reformas para el país.
Luego de tensiones en el partido ante la postura de legisladores que pedían autorización para negociar con Calderón, unos 400 delegados en la mesa aprobaron la línea política del partido, que se ajusta a la exigencia del ex candidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador, de no buscar la negociación. Sólo hubo cinco votos en contra.
“En el Congreso de la Unión debemos impulsar la reforma que necesita el país como impedir que prosperen las propuestas de la derecha y consolidar alianzas para fortalecer la opción de las izquierdas”, dice el documento.
El senador Jesús Ortega, coordinador del Frente Amplio Progresista, formado por el PRD, el PT y Convergencia tras las elecciones de 2006, defendió el documento, a pesar de que su corriente, denominada “Los Chuchos”, buscaba una política de negociación con el Gobierno.
“El Gobierno de Calderón es ilegítimo y todo diálogo con un Gobierno ilegítimo no es auténtico”, dijo.
Martí Batres, secretario de Desarrollo Social del Distrito Federal, defendió mantener una línea cercana a López Obrador porque había generado “los mejores resultados electorales” para la izquierda.
Sin embargo, el documento también incluyó un apartado de crítica a la campaña presidencial de López Obrador, lo cual provocó protestas de algunos perredistas.
Armando Quintero, secretario de Transporte del Distrito Federal, comentó que el capítulo de la crítica era “una concesión a la derecha y a los medios de comunicación”.