El grupo shii Jezbolá entregó ayer a Israel el cadáver de un ciudadano israelí a cambio de un preso y los restos de dos de sus milicianos muertos en poder del Ejército hebreo, informaron los medios de comunicación libaneses.
El intercambio tuvo lugar en el paso fronterizo de Ras Nakura, entre Israel y el Líbano, en medio de un gran dispositivo policial y tras intensas negociaciones entre la milicia y las autoridades israelíes con la mediación alemana.
Ni Jezbolá ni el Gobierno israelí han confirmado todavía este intercambio.
Según los medios libaneses, el grupo shii entregó a las autoridades hebreas el cuerpo de un ciudadano israelí, cuya identidad se desconoce, que se ahogó mientras nadaba en el mar Mediterráneo y fue arrastrado hasta la costa libanesa, en donde fue recogido por miembros de Jezbolá.
Por su parte, la Agencia Nacional de Noticias libanesa (ANN) señaló que la Cruz Roja Internacional recibió de manos de soldados israelíes los cadáveres de los milicianos y el preso de Jezbolá, en la parte israelí de la frontera.
Más tarde, el convoy se dirigió al territorio libanés, en donde la Cruz Roja entregó el preso y los muertos a los autoridades bajo la atenta mirada de sus familias que esperaban en un puesto de control del Ejército.
Según la agencia, los milicianos muertos son Ali Waswas y Mohamad Dimashquie, que fallecieron en la guerra del verano de 2006 entre Israel y el Líbano, mientras que el prisionero es Hasan Naim Akil.
El padre de Waswas, Husein Waswas, dijo a la cadena de televisión LBC, que le avisaron esta misma tarde que le iban devolver los restos mortales de su hijo.
“Estoy muy contento pero al mismo tiempo enojado porque hubiera deseado también la liberación de otras personas que llevan encarceladas (en Israel) desde hace décadas”, apuntó.
Éste es el cuarto intercambio de prisioneros y de cadáveres entre Israel y Jezbolá con la mediación alemana.
