Eduardo Gamero, ex secretario del Comité de Festejos, niega que hayan incurrido en anomalías en los trabajos que se hicieron en el recinto ferial.
El Siglo de Durango
Niega Eduardo Gamero, ex secretario del Comité de Festejos del 443 Aniversario de Durango, que se haya incurrido en anomalías una vez que la Contraloría Municipal ha dado a conocer que se mantiene un adeudo con EGS Constructora –la cual es de su propiedad- por un monto de 51 mil 285 pesos.
Descartó que se haya dado “tráfico de influencias” sino que todo se debió a que contrataron a una persona que no podía facturar y por motivos de la justificación de los gastos se determinó que su empresa fuera quien diera el respectivo comprobante fiscal.
Aunque al principio se mostró renuente a hablar con los medios de comunicación, el ex integrante del equipo encabezado por Martín Soriano Sariñana incluso dejó ver que desde el inicio de la organización de la Feria 2006 se dieron cuenta que gastarían mucho más de lo presupuestado por el déficit de infraestructura en el Centro Estatal de Convenciones y Ferias.
“Sabíamos desde mucho tiempo antes que iba a haber gastos extras porque nosotros no recibimos completas las instalaciones y se tuvo que equipar mucho, de allí fueron los gastos extras”, mencionó.
Cuestionado sobre el adeudo que el Gobierno Municipal tiene con su empresa, señaló que todo está claro. “Se hicieron algunos trabajos en el casino, los cuales fueron hechos por una persona que no facturaba; para comprobar, en una reunión se acordó que yo facturara por él. Entonces, lo que me daban a mí yo se lo daba a él, pero nada más era de materiales y de mano de obra de él”, relató.
Se le preguntó el motivo por el cual no se contrató a una compañía legalmente constituida para que no hubiese problemas con las facturas, pero afirmó que todo se hizo con el afán de “ahorrar dinero”.
“Por las prisas que llevábamos... la plancha del casino nos la entregaron exactamente el día viernes 14 de julio para ponerle la infraestructura. En ese momento, si contratábamos una empresa formal de aquí a que hacíamos todos los detalles de eso, de la formalidad, no teníamos tiempo para echar a andar el casino, que era uno de los compromisos que teníamos con el Palenque”, refutó.
“¿Qué fue lo que pasó?, se contrató gente de la que estaba aquí (trabajando en la construcción de la Expo Feria) especializada. Se trajo a ese señor que se apellida Maldonado, se puso a trabajar; a la hora del pago que no tiene facturas se acordó en una reunión con nosotros que yo facturara”, analizó.
Gamero reconoció que aún queda un adeudo pero, según aseveró, él ha pagado de su propio bolsillo al trabajador mientras se define si el Municipio solventará el pasivo o no.
“Aquí se actuó de buena fe, la buena voluntad de siempre, de sacar adelante todo esto. Se tuvieron muchos contratiempos, con muchas prisas. El Patronato tuvo muchos contratiempos para entregarlo todo, una acumulación de problemas”, se defendió.
Fue cuestionado de sus razones para ampararse luego de la resolución que emitió la Contraloría Municipal al terminar la auditoría al Comité y se limitó a señalar que fue una decisión que se hizo en el grupo de trabajo por cuestiones de unidad.
“Yo sé que lo mío es administrativo, me señalaron porque no pasé información a mis superiores por escrito, más bien se hizo verbal”, puntualizó.
Rompe el silencio
Eduardo Gamero, ex secretario del Comité de Festejos encabezado por Martín Soriano Sariñana, dio su punto de vista sobre los resultados obtenidos en su administración.
-Refutó que se tengan conflictos con el personal de la Presidencia Municipal, en especial con la Contraloría encabezada por María de Lourdes Nápoles Orrante.
-Juzgó que el contexto que rodea al Comité de Festejos del 443 Aniversario de Durango ha sido “tergiversado”.
-En lo concerniente a la deuda de 57 mil 500 pesos con la UAD por conceptos de publicidad en sus medios de comunicación, dijo no conocer nada al respecto.
-Prefirió no emitir opinión alguna sobre si los regidores y el Presidente Municipal les dieron la espalda.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango.
