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Madrid, España.- El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, reconoció ayer como ?claro error? su optimismo sobre el proceso de negociación con el grupo separatista vasco ETA y llamó a un nuevo y más amplio pacto antiterrorista.
El jefe del Gobierno compareció ayer lunes ante el Congreso para explicar su política antiterrorista luego del atentado del pasado 30 de diciembre que dejó a dos ecuatorianos muertos y decenas de heridos, pese al cual ETA mantiene su tregua, según el propio grupo.
En reacción inmediata a la posición de Rodríguez Zapatero, el líder del opositor Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, mantuvo su línea de crítica al Gobierno y dijo que todo esfuerzo debe encaminarse en el Pacto Antiterrorista firmado por las fuerzas políticas.
El nuevo consenso nacional para luchar contra ETA pretende convocar en los próximos días al Comité de Seguimiento del Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo, que en diciembre de 2000 firmaron los partidos Socialista Obrero Español (PSOE) y PP. Esa convocatoria es una las principales exigencias de Rajoy, y Rodríguez Zapatero aseguró que la intención es sumar a más fuerzas políticas en la lucha contra ETA.
El presidente del Gobierno español reconoció que ?fue un error de optimismo? decir 24 horas antes del atentado del 30 de diciembre en la Terminal 4 del aeropuerto de Barajas, que ?dentro de un año se estará un poco mejor? en la lucha contra ETA.
Recordó que tras el ataque ordenó ?romper el diálogo? con ETA, pues esa organización había tomado la decisión ?más equivocada y cuyo único destino es el final de la violencia? .
Explicó que tras el anuncio del alto al fuego por parte de ETA hecho en marzo de 2006, decidió abrir el diálogo porque ?la obligación del Gobierno y de su presidente es tratar de poner fin por los medios disponibles, a la violencia?.
?No han cambiado las bases de la acción policial, ni de justicia, ni la política penitenciaria, por lo que los límites de la negociación estaban dentro de la Constitución y la legalidad?, manifestó.
Lamentó que se trate del primer proceso de paz en el que el Gobierno español no cuenta con el respaldo de la principal fuerza opositora, mientras que él cuando era dirigente opositor le ofreció en 2000 su apoyo al Ejecutivo que presidía José María Aznar del PP.
Rechazó que pueda ser criticado por su actitud ante el Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo, ya que fue una iniciativa que él promovió ante Aznar para luchar juntos contra ETA.
Por su parte, el dirigente del PP Mariano Rajoy criticó al presidente por su equivoca apreciación y no haya reconocido abiertamente su error, ?ya que con una organización terrorista no se puede negociar?.
Pidió que cuando se trata de una lucha contra ETA desde la legalidad y no desde la concesión, ?puede contar con el PP, incluso como ?el único aliado fiable?, pero le exigió que no le use como coartada para negociaciones con la dirigencia etarra.