El director ejecutivo del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH-Sida (ONUSIDA), Peter Piot, reconoció los avances de México en la lucha contra esa pandemia, pero consideró que aún persiste la discriminación contra las personas infectadas.
En conferencia de prensa en el 10 Congreso Nacional sobre VIH/Sida y Otras Infecciones de Transmisión Sexual, señaló que aunque se ha logrado que la mayoría de los mexicanos enfermos tenga acceso universal a los medicamentos, también son víctimas de discriminación y homofobia.
Esa situación se analizará en la 17 Conferencia Internacional sobre Sida, a desarrollarse en la ciudad de México en agosto de 2008, en la que se pretende conocer la respuesta de México ante el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (Sida).
Refirió que hace dos años México era el pionero en América Latina con sus campañas contra la homofobia, pero ese avance se ha detenido, por lo que se requiere mantener las políticas públicas de ese tipo.
El funcionario de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) recomendó incrementar la educación sexual a niños y jóvenes, a fin de que tengan información clara sobre el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) y otras enfermedades venéreas.
A su parecer, los medios de comunicación pueden salvar más vidas que los médicos mediante la promoción de políticas preventivas, pues juegan un papel muy importante en la difusión de programas de esa naturaleza.
El titular de ONUSIDA detalló que en la reunión que tiene programada el lunes próximo con el presidente Felipe Calderón y el titular de la Secretaría de Salud (SSA) tratará temas como la preocupación de la sociedad civil porque continúe la discriminación de las personas infectadas con VIH-Sida.
Otros puntos a tratar serán la persecución contra los homosexuales en algunos municipios del país, así como del alto costo de los retrovirales.
Por otra parte, el presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Emilio Alvarez Icaza, llamó a levantar la voz para contrarrestar esa pandemia, pero sobre todo evitar la discriminación y la estigmatización.
En una conferencia magistral en el Poliforum de esta ciudad dio a conocer que en una encuesta nacional, 54 por ciento de los jóvenes no quiere tener como vecino a una persona con VIH/Sida, cifra que se incrementa en el Distrito Federal, donde asciende a 58 por ciento.
Ello significa que los jóvenes ya tienen un chip discriminatorio contra ese sector de la población, lo cual no puede continuar, y se debe corregir, por lo que es necesario fomentar una cultura de paz y no violencia en las escuelas del país, a fin de que los jóvenes respeten la diversidad, puntualizó.