EL SIGLO DE TORREÓN
SAN PEDRO, COAH.- En este año el Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas) ha logrado recuperar poco más de 20 millones de pesos de su cartera vencida, pero los usuarios mantienen un adeudo que aún supera los millones de pesos.
Humberto Núñez Sifuentes, gerente de este sistema, informó que en este momento la cartera vencida es de 102 millones de pesos y aseguró que al inicio de la administración la cifra superaba los 130 millones.
El funcionario explicó que por esta razón implementaron diversas campañas para tratar de recuperar la cartera vencida, primero pusieron en marcha un programa donde los morosos sólo pagaban el 30 por ciento de su deuda, pero la respuesta fue muy escasa y por ello se decidió contratar a un despacho jurídico para emprender acciones legales contra los deudores.
“Cuando interviene el despacho nosotros ya no podemos negociar, ellos se encargan del caso, tengo entendido que se condonan los recargos y en algunos casos se condona parte del capital, hasta un 40 por ciento de descuento pero previo estudio socioeconómico”, dijo.
Núñez Sifuentes reconoció que el despacho cobra una comisión del 20 por ciento de la cifra que logre recuperar, pero aun así consideró que los resultados han sido positivos, porque los ingresos mensuales del sistema se incrementaron de 1.5 millones de pesos a 2.3 millones.
“El despacho va a seguir trabajando, si es necesario van a hacer embargo precautorio de los inmuebles, no les vamos a quitar sus viviendas a los deudores, pero vamos a registrar el adeudo en el Registro Público de la Propiedad para que no puedan vender los inmuebles hasta que liquiden su deuda con nosotros”, agregó.
El gerente del Simas señaló que en enero van a empezar a registrar los embargos precautorios ante el Registro Público de la Propiedad, para tratar de presionar a los más de seis mil usuarios morosos que tiene el sistema.
NO HAY CORTES
El gerente del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas), Humberto Núñez Sifuentes, informó que suspendieron el programa de limitación del servicio porque no estaban obteniendo los resultados esperados y sólo distraían al personal de otras labores.
“Nosotros enviábamos a la cuadrilla a cortar las tomas domiciliarias y cuando se retiraban del lugar la gente se volvía a reconectar, entonces nunca íbamos a acabar, vimos que no tenía caso y mejor suspendimos el programa”, dijo.
Además el funcionario señaló que prácticamente sería imposible limitarle el servicio a seis mil usuarios de un padrón que está integrado por 21 mil viviendas.