El conservador Nicolás Sarkozy (izquierda) y la candidata socialista, Segoléne Royal (derecha) son los candidatos con mayor probabilidad de pasar a la segunda vuelta en Francia. (EFE)
El fuerte interés y la gran expectación por las elecciones presidenciales francesas, que hoy domingo celebran su primera vuelta, propició el mayor aumento de la cifra de electores registrados de los últimos 26 años.
Datos oficiales, revelados ayer por las autoridades electorales, mostraron que hay unos 3.3 millones más de personas con derecho a voto inscritas para sufragar en estos comicios respecto a las últimas elecciones presidenciales de 2002.
Esta cifra mostró un crecimiento de 4.2 por ciento en unas elecciones presidenciales, el mayor registrado en los últimos 26 años, desde las elecciones de 1981, cuando ganó el socialista Francois Mitterrand.
Los analistas explican que este fenómeno se dio porque la mayoría de franceses han percibido la importancia del escrutinio para el futuro del país, que necesita numerosas reformas, según los principales candidatos y la mayor parte de la opinión pública.
Una parte de los nuevos inscritos, no cuantificada, procedería de algunos barrios marginales de las grandes ciudades francesas y votaría por primera vez. Su objetivo sería expresar su descontento por el abandono que sufren estas zonas deprimidas y para castigar con su voto y no con ataques al candidato conservador, Nicolás Sarkozy, de quien denuncian los insultó durante la ola de violencia del otoño de 2005.
El fuerte crecimiento del número de electores registrado elevó a 44.5 millones el padrón electoral con derecho y habilitado para votar hoy domingo en las 65 mil casillas electorales disponibles para ejercer el sufragio.
Del total de los inscritos, un total de 820 mil se registraron en consulados franceses desde países de todo el mundo, para votar por correo, el doble que los inscritos para las elecciones presidenciales de 2002.
Por primera vez, se emplearán urnas electrónicas, más rápidas para computar el resultado, más cómodas y ecológicas para votar que las convencionales pero muy criticadas en Francia. Un total de un millón y medio de electores registrados tendrá acceso al denominado voto electrónico en 82 comunas (municipios) de más de tres mil 500 habitantes cada una.
