La normatividad para la transportación de carne señala que este servicio lo deben desarrollar los camiones repartidores dependientes del Gobierno Municipal. Son blancos, térmicos, y tienen la leyenda de transporte del Rastro Municipal.
Pretenden terminar con irregularidades y riesgos para la salud de los consumidores
El Siglo de Durango
El Municipio de Durango ha iniciado el proceso para la regularización del transporte de carne procedente de los dos grandes rastros ubicados en la mancha urbana capitalina.
El objetivo es claro: lograr que cuando menos el 70 por ciento de la carne que procesan diariamente los rastros de Durango sea trasladada a sus destinos finales en los camiones repartidores propiedad municipal.
Para ello, se busca concretar lo antes posible dos acciones: por un lado, reducir los precios de estos servicios de transporte, y por el otro, ampliar el número de unidades especiales de distribución de cárnicos.
Las autoridades de Salud Pública y Medio Ambiente admitieron que en la actualidad el traslado de productos cárnicos hacia los puntos de venta y consumo se desarrolla sin usar el transporte especial que ofrece el Gobierno.
Y es que la Dirección de Salud Pública reconoció que se encareció mucho el costo del servicio de transportación en las dos unidades refrigeradas que son propiedad del Gobierno Municipal de Durango.
Ante ello, la dependencia ha pedido a la Dirección de Finanzas y Administración considerar una reducción en los precios de los fletes de cárnicos para que este servicio sea mucho más accesible para los comerciantes.
El titular de esta Dirección, Alejandro Campa, señaló que el incremento en el costo de los servicios de transporte especial de la carne de los rastros provocó que se cayera considerablemente el uso de este servicio.
Estimó antes de que subiera tanto el precio de cada flete de carne las unidades municipales de transporte realizaban la movilización de 16 ó 18 canales cada una al día, mientras en la actualidad el promedio es de una a tres canales diarias.
Tal situación generó que paulatinamente los tablajeros o comerciantes finales usaran sus propias unidades de transporte, algunas apropiadas, la mayoría no, para realizar por su cuenta el traslado de la carne de los rastros.
Por esa razón el vocero de la Dirección Municipal de Salud y Medio Ambiente puntualizó que la intención es firme en el sentido de mejorar el servicio, hacerlo más económico y oportuno para que la carne en Durango sea distribuida en las condiciones más higiénicas y seguras.
Lo dice la ley
La normatividad para la transportación de carne señala que este servicio lo deben desarrollar los camiones repartidores dependientes del Gobierno Municipal. Son blancos, térmicos, y tienen la leyenda de transporte del Rastro Municipal.
Sin embargo, los tablajeros no son asiduos a contratar los servicios de este transporte gubernamental porque es muy caro, dicen, ya que actualmente cuesta unos 160 pesos por canal, pero hace poco llegó a costar más de 200 pesos el servicio.
Por ello, y ante la falta de vigilancia de las autoridades, nadie usa ese transporte especial que en teoría garantizaría limpieza y seguridad en el traslado de los cárnicos.
