AP
JERUSALÉN.- El jefe del estado mayor del Ejército de Israel, teniente general Dan Halutz, blanco de fuertes críticas por las deficiencias de la guerra en el Líbano, ha renunciado, dijo el vocero del Ejército ayer.
Los pedidos de renuncia de Halutz se multiplicaron desde el fin de la guerra de 34 días. Su renuncia es un golpe indirecto al primer ministro Ehud Olmert, a su vez blanco de críticas por su manejo de la guerra y por la decisión misma de iniciarla.
Horas antes, el ministerio de Justicia ordenó a la Policía iniciar una investigación del papel de Olmert en la venta por el Gobierno, en 2005, de uno de los bancos más grandes de Israel. La semana pasada, una encuesta reveló que la tasa de aprobación de la que goza Olmert es de apenas el 14 por ciento, debido principalmente a la guerra.
Israel lanzó un ataque en regla contra los guerrilleros libaneses de Jezbolá después del secuestro de dos soldados y la muerte de otros tres en una incursión a través de la frontera el 12 de julio. La operación no pudo lograr sus objetivos principales de derrotar a Jezbolá y rescatar a los soldados.
La oficina del vocero militar dijo que Halutz envió su carta de renuncia a Olmert y el ministro de Defensa Amir Peretz, también criticado a raíz de la guerra.
Halutz dijo en su carta que asumía la responsabilidad por el desenlace de la guerra, informó la radio del Ejército.
?Para mí, el concepto de responsabilidad es todo?, escribió Halutz, según la emisora.
Al anunciar la renuncia de Halutz, la oficina del vocero militar dijo que el oficial presentó su renuncia luego de completar decenas de investigaciones militares sobre diversos aspectos de la guerra. ?Ahora que se ha completado el proceso, el jefe de estado mayor presentó su renuncia inmediata?, dijo el vocero en un comunicado.
La oficina del vocero dijo que Olmert y Peretz deben aceptar la renuncia para que sea efectiva.
Las oficinas de Olmert y Peretz no hicieron declaraciones en lo inmediato.
Los combates dejaron más de mil muertos de ambos bandos, según la ONU y funcionarios israelíes y libaneses.
