Comenzará Cofepris a operar el Programa de monitoreo de cloro residual agua limpia y calidad bacteriológica en la ciudad capital.
En Durango por lo menos 5 municipios no cuentan con vital líquido confiable para el consumo humano
El Siglo de Durango
El porcentaje de agua con calidad bacteriológica para uso y consumo humano en el país es del 91.6 por ciento, pero en Durango este porcentaje disminuye hasta el 66.5 por ciento, lo que provoca que el estado se coloque entre las entidades más rezagadas en lo referente a los sistemas recomendados para clorar el agua y con esto garantizar el uso de agua potable.
Ayer estuvo en esta ciudad de Durango Juan Antonio García Villa, titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), quien asistió a firmar dos convenios con el Gobierno del Estado; el primero de ellos, para comenzar a operar el Programa de monitoreo de cloro residual agua limpia y calidad bacteriológica para uso y consumo humano, así como el Convenio de coordinación y cooperación interinstitucional para la prevención, control y erradicación de la brucelosis en el ser humano y en los animales.
En este evento el funcionario mencionó que en el caso de Durango por lo menos unos cinco municipios no cuentan con las medidas correspondientes en la cloración del agua.
Juan Antonio García manifestó que se espera llegar a un 95 por ciento de calidad pura del agua como lo plantea el Plan Nacional de Desarrollo 2007-2012, como una de las políticas que tiene el Gobierno Federal.
El funcionario federal informó que muchos otros estados tienen problemas graves en cuanto a que no tienen cloración del agua. “Durante el año 2000 el nivel de calidad bacteriológica ponderada en todo el país era poco más del 80 por ciento, al final del sexenio pasado se llegó al 91.6 y ahora se pretende llegar al 95”, comentó.
También dijo que las mediciones de la calidad del agua se hacen en las fuentes de este líquido, pero conforme se va distribuyendo en las redes, el porcentaje de calidad bacteriológica disminuye. Dijo que si las mediciones se hicieran en el interior de los domicilios, los valores bacteriológicos del agua seguramente se elevarían, a causa de que no se hace la limpieza adecuada en la red que la distribuye.
Otro de los problemas que existe también en México es la presencia de minerales pesados, como es el caso de fluór, arsénico, cadmio, que se resuelve a través de la mezcla de agua para que el porcentaje de contenido esté conforme a la norma; sin embargo, dijo que llegará un momento que ni siquiera esto podrá resolver el problema.
Una de las soluciones posibles es la utilización de procesos de ósmosis inversa, pero, en forma desafortunada, el tratamiento a través de este proceso es muy caro, de tal modo que no se resolvería el problema. En este sentido, dijo que se tendrá que pensar en otras estrategias.
Poca afluencia
La firma del convenio con el Gobierno del Estado, sobre el Programa de monitoreo de cloro residual agua limpia y calidad bacteriológica para uso y consumo humano, contemplaba una mesa de trabajo que se realizaría entre la Comisión Federal para la Protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris), autoridades de la Secretaría de Salud del Estado (Ssa), así como varios municipios.
En forma desafortunada, la asistencia de alcaldes o bien de representantes fue raquítica. Por lo menos de unos 30 municipios que fueron invitados a la firma de este convenio y a las mesas de trabajo se presentaron algunos 15 de ellos.
De acuerdo con la información que en varias ocasiones ha dado a conocer la Ssa, la problemática de cloración de agua en algunos municipios es grave y por este motivo existen muchas enfermedades gastrointestinales; sin embargo, la respuesta de los ediles no fue suficiente.