EL SIGLO DE TORREÒN
TORREÓN, COAH.- Exquisitos frescos que se encontraban sepultados por capas y más capas de diferentes tipos de pintura en el Ateneo Fuente de Saltillo, Coahuila, salieron a la luz después de la restauración que realizó Jesús Siller Reyes en el lugar. El trabajo con el que se lograron rescatar dichos frescos inició en 2001 y ahora en 2007 Siller muestra el trabajo consumado: ?Acabo de terminar la restauración del Ateneo Fuente de Saltillo, Coahuila, ésta es la primera preparatoria del Estado que tiene más de cien años de antigüedad, y el edificio como tal data de 1932 y se hizo en la administración de don Nazario Ortiz, es un edificio Art-Decó extraordinario que tiene anexo un auditorio más conocido como el paraninfo del Ateneo Fuente que tiene capacidad para aproximadamente 850 personas, y que cuenta con un área de Mezanine extraordinario?. Todo este edificio, dice el restaurador, ?en esa época recién había terminado de pintar Tarazona el Teatro Isauro Martínez (en Torreón) e inmediatamente don Nazario se lo lleva a Saltillo y allá pinta tres obras muy interesantes una la Escuela Coahuila, unos murales que se encuentran en el Palacio Rosa y finalmente el Ateneo Fuente?. Explica que Tarazona fue un pintor español ?que esencialmente más que un pintor de caballete era un extraordinario escenógrafo y su obra la podemos apreciar en el Teatro Isauro Martínez, y lo mismo hizo para con este edificio (el Ateneo Fuente)?. La historia comenzó cuando llamaron a Siller para restaurar una pequeña área del vestíbulo que se encontraba a la vista ?y digo a la vista porque el resto de los frescos estaban totalmente cubiertos con pintura de esmalte, vinílicas, barnices, etcétera?, explica que cuando él llegó el edificio estaba completamente pintado de blanco y no se veía nada y cuando empiezo a restaurar el vestíbulo me enteré que lo que había ahí era pintado por Salvador Tarazona (porque tampoco se tenía ese dato) y le pedí al rector del Ateneo fuente que me dejara hace algunas calas en otras áreas porque me parecía que estábamos a punto de descubrir un gran tesoro y que lo que estábamos haciendo era apenas la punta de la hebra?.
LA REVELACIÓN
De este modo Siller continúo con sus pruebas en los muros y otras áreas del Ateneo Fuente encontrando un maravilloso acervo cultural: ?y descubrí que debajo de esas capas de pintura -que fueron hasta 30 en algunas área- estaban los frescos y entonces el rector tomo la decisión de seguir con la restauración y penosamente en muchas de las áreas muchos de los frescos estaban degradados completamente y hubo que rehacerlos iniciando con el vestíbulo del Ateneo a todo lo alto de sus cuatro niveles (25 metros de altura) fue un trabajo de andamio?. Los acabados que fueron encontrando fueron de fresco cementado ?que se ve como si fuera mármol de diferentes colores? y terminando el vestíbulo la obviedad del resultado obligaba a investigar en el paraninfo que era el lugar más importante a recrear y pues sí, encontramos ahí todo un espectáculo en las mismas condiciones por lo cual se tuvo que hacer un patrón porque Tarazona utilizaba la repetición en sus escenografías con una cantidad de iconografía tremenda?. Mención aparte merece la restauración del arco del foro del paraninfo sólo había una media circunferencia ?que era claro que era un sol con un delineado horizontal que la mayoría pensaba que era una montaña. En los costados del foro hay dos murales que afortunadamente nunca los cubrieron, uno que habla de la ciencia y otro que habla de la cultura y las artes?, y así respaldado por investigaciones y mucha sensibilidad Siller logró descifrar las imágenes del delineado horizontal restaurando como una pareja lo que muchos pensaban que era una montaña, y acertó: ?No teníamos memoria fotográfica pero poco después de haber terminado nos visitó el hijo de don Nazario Ortiz, que a él le tocó ver todo esto tal cual fue originalmente nos dijo que todo eso le había hecho hacer una regresión de muchos años atrás, nos pidió a los que estábamos ahí dejarlo unos minutos solo y después platicando con él nos dijo: ?es que esto es lo que había?, lo único que era diferente era que en medio de la pareja puse un bebé en un moisés y antes estaba escrita la palabra ?Lux??.
IMPORTANCIA
Para Siller la restauración del Ateneo Fuente es una oportunidad para revalorar la obra que se tiene en el Estado de Tarazona: ?para entender más a ese pintor que vino a darnos mucho a nutrirnos a enriquecernos de toda la cultura que él como español que deja una lectura no sólo del gozo de verlo sino de cómo verlo y nos podemos enganchar de la gran fuerza étnica que tenemos y que nos da esta multiplicidad de conceptos de índole cultural, pero necesitamos observar más la obra para saber qué es lo que nos quiere decir el artista?.