EL SIGLO DE TORREÓN
Torreón, Coah.- La balística comparativa, el señalamiento de testigos y la identificación de una persona, no fueron elementos de prueba suficientes para girar una orden de aprehensión contra una persona implicada en un homicidio calificado, según el titular del Juzgado Primero del ramo penal. “En ese momento no había pruebas, pero la resolución no es definitiva”, dice el juez Octavio Sánchez Sánchez.
Por su parte, en la Procuraduría General de Justicia del Estado de Coahuila (PGJEC) insisten en que hay elementos para señalar a Saúl Castillo de la Torre, quien estuvo arraigado durante 17 días, como implicado en la ejecución del abogado Enrique Juárez Guerrero, de 47 años, el 13 de diciembre de 2006.
La prueba “del rayado del casquillo” (balística comparativa) acreditada al 100%, es un elemento contundente del Ministerio Público, al sostener que la arma de fuego asegurada el pasado 24 de marzo a Saúl Castillo por agentes de Seguridad Pública es la misma que se utilizó para asesinar al abogado.
Octavio Sánchez señala que tiene conocimiento de la prueba aportada por la PGJEC, pero que también hay un dictamen de peritos de la Procuraduría General de la República, donde señalan que la arma de fuego se encontraba incompleta y no se podía utilizar. Sobre el señalamiento de los testigos, el juzgado considera que hubo contradicciones, toda vez que una persona declara que llegó al lugar luego del atentado y casi al finalizar el arraigo sostiene que vio al ejecutar que reconoció en una fotografía posterior.
También se dio a conocer que existe el señalamiento de otro testigo que mencionó a Sandra Montoya Saucedo, mujer que acompañaba a Saúl Castillo al momento de su detención, como la persona que tenía una fuerte deuda con el occiso.
Sobre Montoya Saucedo se dio a conocer que ante el Ministerio Público de la Federación declaró que la arma de fuego calibre 9 milímetros con un silenciador hechizo, era suya y al ser reincidente en posesión de armas de uso exclusivo del Ejército, le fue negada la fianza y está internada en el penal de la localidad.
Como se dio a conocer en su momento, el crimen ocurrió a las 9:00 horas del 13 de diciembre en el exterior de la oficina del finado, ubicada en la avenida Allende y calle 30.
Termina arraigo deimplicados en asesinato
Ayer a las 15:00 horas, terminó el arraigo de 2 sujetos implicados en la muerte de Carolina Barrientos Mancinas, quien era esposa de un custodio del Centro de Readaptación Social (Cereso) en San Pedro.
Ella fue asesinada el 4 de octubre de 2006 por un sujeto cuando al abrir la puerta, la baleó para luego huir del lugar. El agente del Ministerio Público, Ronaldo Anaya informó que la averiguación del caso ya está integrada y que sólo falta que el juez determine la culpabilidad de los dos individuos que hasta ayer estaban en calidad de arraigados en el Hotel 10.
Anaya dijo que el juez tiene la facultad de continuar el arresto sólo un día más, pero una vez que analice el caso, dará a conocer una determinación.
En este caso, están involucrados los sampetrinos David Salas Rodríguez alias ‘El Lobo’ y Leonardo Gaytán Méndez alias ‘La Leona’, quienes ya tienen antecedentes por robo calificado. (Por Cecilia Aguilar)