Reviven fiesta ochentera
Convierten el Casino del Campestre en la desaparecida discoteca La Rosa
Quién no se sabía las canciones de Flans, Timbiriche, Soda Estereo, Caifanes, Madonna, Menudo y la de Together Forever de Rick Astley, entre otros muchísimos clásicos de los 80...
Repleto lució el Casino del Club Campestre Torreón, el cual se convirtió por unas horas en un “antro” para dar vida a Flashback La Rosa, una noche ochentera a la que acudieron alrededor de mil personas.
Sin duda, el entusiasmo embargó a cientos de laguneros que minutos antes de que el Campestre abriera sus puertas esparaban ya entrar para revivir viejos tiempos y el ambiente que se disfrutaba en la discoteca La Rosa.
Con una escencia lo más real posible se organizó este acontecimiento, idea de Lizeth Safa (hija de unos de los dueños) con el fin de ayudar a la Asociación Cuenta Conmigo, que ofrece apoyo a personas con capacidades diferentes y que por carencias económicas pretendía cerrar.
Pero gracias al apoyo de los laguneros, especialmente de patrocinadores que se unieron a la causa, Flashback La Rosa se pudo llevar a cabo por lo que los niños de la institución seguirán contando con su centro.
La fiesta comenzó así: Poncho Iglesias, Juan José Carrillo y Roberto Dávila, entonces agentes de seguridad de la disco, recibieron en la entrada a los asistentes con martinis.
Y es que no solamente Timbiriche, Menudo o Flans tuvieron su reencuentro, también lo hicieron los laguneros que gozaron de una noche lounge, a media luz y con el ambiente de antes, es decir saludos por todos lados, caballeros de pie disfrutando de la pasarela de la concurrencia y una pista repleta de gente bailando la excelente selección musical que estuvo a cargo de Mony Monroy (con sus cuatro tornamesas) y quien hizo mancuerna con Gerardo Gómez.
El buen ambiente se dejó ver en cada una de las mesas, inclusive en la que ocupó por un rato Óscar Hernández (Pablo Montero), que se la pasó saludando a sus viejos amigos de los que hace años se hacían llamar “Los Waltts” y “Los Pepos”; más tarde llegó Efraín López, a quien lo vimos en plena charla con Sergio de la Garza y Luisa Sáenz.
Otro de los grupos de amigos que se la pasaron genial fue el de Susana Jalife, Pilar Ortueta y compañía, mismas que extrañaron la presencia de sus buenos amigos María Luisa y José Ángel Pérez.
En resumen, Flashback La Rosa cumplió con su cometido: revivir los viejos tiempos y contribuir con una buena causa. La fiesta terminó pasadas las 5:00 de la mañana del siguiente día.