Un hombre estadounidense sustrajo de varias escuelas de Wisconsin miles de zapatos pertenencientes a estudiantes, para satisfacer su deseo fetichista, por lo que las autoridades lo detuvieron y lo acusaron por el hecho.
Los zapatos de mujer se usan para caminar, para correr y hay algunos, preferentemente de charol y tacón de aguja, que se han empleado para beber champán, pero Erik Heinrich robó mil 500 pares simplemente para olerlos, según informó la prensa local.
Heinrich, de 26 años, fue detenido en el condado de Waukesha, Wisconsin acusado del peculiar robo a varias muchachas estudiantes de secundaria de la zona, según la policía.
Al parecer, Heinrich sustrajo los zapatos de las taquillas de los vestuarios femeninos de cuatro centros educativos de Waukesha, a los que accedía con una llave maestra que poseía desde que trabajó para una compañía de instalación de cable.
Según el diario Journal Sentinel, de Milwaukee, la pasión de este natural de Kenosha, Wisconsin por los zapatos trataba de satisfacer un deseo de tipo fetichista.
"Le gustaba olerlos", dijo el teniente de Policía de Waukesha William Graham en declaraciones al diario local.
Al parecer su obsesión sobrepasaba el calzado, ya que la Policía encontró además numerosas fotos de chicas adolescentes, varios pares de calcetines deportivos, tres anuarios, el plano de un centro educativo y hasta un par de medias de color rosa.
El detenido, que fue acusado de tres delitos de robo con allanamiento, apareció en su primer juicio sin abogado y alegó que no estaba seguro de si sería capaz de recaudar los 10 mil dólares de fianza que le establecieron para poder quedar libre.
La policía descubrió su autoría gracias a los videos del circuito de seguridad de una de las escuelas en el que se veía la camioneta Dodge en la que el acusado se subió después de salir de la escuela en la que había robado varios de los pares de zapatos.
Heinrich había sido condenado a un año en libertad condicionada a orientación psicológica y a 50 horas de trabajos comunitarios por otro robo cometido en 2005 en la escuela de secundaria Tremper, en Kenosha.
