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LONDRES, INGLATERRA.- El cantante Robbie Williams abandonó el centro de rehabilitación en que se encontraba en Arizona una semana antes de concluir su tratamiento y ahora se refugia con su madre en su mansión de Los Ángeles, informó hoy la prensa local.
La salida del centro de rehabilitación, hecha por Williams, fue confirmada este miércoles por su portavoz a través de un comunicado, en el que sin embargo, se declinó comentar sobre el hecho de que éste se había marchado sin concluir el tratamiento.
?Robbie Williams ha completado su estancia en Arizona y ahora continúa su programa de cuidados posteriores en Los Ángeles?, dijo la vocera del interprete de Feel, quien ingresó a rehabilitación el pasado 13 de febrero, día de su cumpleaños número 33.
De acuerdo con el tabloide local The Sun, el músico británico no sólo abandonó una semana antes su tratamiento de un mes, para regresar al lado de su madre sino que además declinó revelar el verdadero sitio en el que recibió el tratamiento.
Aunque Williams había informado que se encontraba internado en el Centro Meadows de Arizona, según el tabloide, en realidad estuvo todo este tiempo en el Cottomwood de Tucson, uno de los más estrictos de Estados Unidos, por unos mil 315 dólares la noche.
?Robbie tenía que estar aquí cuatro semanas, pero se fue después de tres?, reveló a The Sun una fuente del citado centro, quien sin revelar los motivos del cantante, constató que en el Cottonwood, ?no se les da tratamiento de estrellas?.
En el Cottomwood, los pacientes deben de compartir habitación con otras dos personas y todos los días tienen llamados para su reunión de desintoxicación a las siete de la mañana, para más tarde compartir un desayuno comunitario en la cafetería del lugar.
Otras actividades diarias, tras el desayuno, son una terapia grupal y posteriormente, una asistencia personalizada con un especialista, pero los primeros cinco días son de desintoxicación, seguidos por una estricta vigilancia.
Williams, quien tiene fuertes problemas de adicción a los anti-depresivos, las pastillas para dormir y la cafeína, se refugia en su lujosa casa al lado de su madre Jan, quien casualmente es consejera para el combate de adicciones al alcohol y las drogas.