Agencias
LONDRES, INGLATERRA.- La estrella del pop británica Robbie Williams ingresó a una clínica de desintoxicación en Estados Unidos, tras luchar durante varios años contra la depresión y otros ?demonios?, informó ayer su portavoz, día en que el cantante cumplió 33 años.
Williams, quien vive en Los Ángeles, California, ingresó en la clínica para tratar su problema de dependencia a ciertos fármacos, explicó la fuente.
?Robbie Williams ha sido admitido en un centro de tratamiento en Estados Unidos por su dependencia de medicinas prescritas. No habrá más comentarios sobre este asunto?, afirmó el vocero.
Pese a sus millones y a su fama, el cantante nunca logró escapar a sus demonios, sufriendo largos periodos de intensa depresión, inseguridad y falta de autoestima.
En una entrevista, Williams dijo que había sido como vivir en ?un hueco negro?.
Tras la separación en 1996 de su grupo, Take That, el cantante, que se sumió en el alcohol y la cocaína, estuvo interno en una clínica de rehabilitación.
?A veces corría desnudo agarrado a una botella de vodka, peleando con fantasmas?, contó.
El anuncio de la hospitalización del artista se efectuó dos días después de que su ex novia, la modelo Lisa D?Amato, de 26 años, revelara en una entrevista que Williams tomaba constantemente antidepresivos y que vivía atormentado, incluso cuando dormía. D?Amato manifestó que Williams, a quien conoció en una fiesta en Los Ángeles, vivía obsesionado, revisando por ejemplo lo que se escribía sobre él en la Red.
El último disco de Williams, Rudebox, no recibió buenas críticas ni logró el éxito de álbumes anteriores. Aunque Rudebox logró colocarse en las listas de popularidad tras su lanzamiento, sólo ha vendido tres millones de copias a nivel mundial, un notable fracaso en comparación con el álbum anterior, Intensive Care, que superó los siete millones de copias.
?Estaba claro que estaba luchando con sus demonios. No necesita alcohol, pero necesita antidepresivos para hacer frente al día. Una buena parte del tiempo parecía estar en el límite?, declaró la modelo al diario sensacionalista News of the World. En una entrevista en 2005, Williams habló de su adicción a antidepresivos. ?Traté de dejarlos, pero creo que mi cuerpo se había vuelto adicto?, expresó en aquel entonces.
La experta Pam Armstrong, que ha fundado un grupo para gente adicta a los tranquilizantes y antidepresivos, explicó que tratar de dejar los medicamentos puede ser incluso más difícil que la depresión. ?La gente toma antidepresivos porque se siente mal, pero cuando tratan de dejarlos se sienten frecuentemente peor?.
Armstrong añadió que la gente depresiva sufre síntomas de aguda ansiedad y un sentimiento general de falta de confianza.
?La gente piensa que se están sumiendo nuevamente en la depresión, pero son más bien los resultados de dejar los medicamentos?, indicó.