Egipto edifica un muro para cercar y cuidar a la Meseta de las Pirámides de Guiza, entre las cuales se encuentra el monumento del Esfinge.
Las autoridades egipcias están a punto de terminar un muro de hormigón con cámaras de vigilancia alrededor de la meseta de las Pirámides de Guiza dentro de un proyecto de remodelación de esta zona arqueológica, primera atracción turística del país.
El director de la administración de las antigüedades egipcias, Shabán Abdel Gawad, explicó que la construcción del muro -de 200 kilómetros de longitud- que empezó en el año 2002, se acabará el próximo mes de junio dentro de la primera etapa del proyecto.
El muro dispone de 265 cámaras de vigilancia para observar la zona arqueológica, que acoge una de las Siete Maravillas del Mundo Antiguo.
El muro separa la meseta de la zona cercana de "Nazlet El Semán", donde se encuentran decenas de establos de caballos, que hasta hoy ofrecen a los turistas llevarles a caballo en un paseo ilegal pero tolerado dentro de la Meseta de las Pirámides.
La segunda etapa del proyecto incluye especificar espacios fuera de la meseta para aparcar coches y camellos, y transportar a los visitantes en vehículos eléctricos hasta cerca de los monumentos.
Uno de los principales objetivos de la cerca es prohibir la construcción irregular de viviendas cerca de la zona arqueológica.
Con la remodelación, sólo se podrá acceder a las Pirámides a través de tres entradas, de las cuales una permite acercarse al monumento del Esfinge mientras las otras dos están en distintos puntos de la zona desértica.