Christian Benítez fue severamente marcado por Andrés José Carevic, sin embargo, el ecuatoriano anotó su cuarto gol del torneo, en el empate a dos goles entre Atlante y Santos Laguna. (Fotografía de Ramón Sotomayor Covarrubias)
Oswaldo Sánchez se vuelve a lastimar el hombro en el gol del empate atlantista.
Santos Laguna dejó ir una ventaja de dos goles para finalmente igualar 2-2 frente a unos revolucionados Potros de Hierro del Atlante, ante un pletórico Estadio Olímpico Andrés Quintana Roo.
Christian Benítez y Daniel Ludueña habían adelantado a los Guerreros, pero el venezolano Giancarlo Maldonado y el enjundioso David Toledo le dieron el empate definitivo a los azulgranas, quienes pudieron quedarse con los tres puntos en los últimos minutos del cotejo.
Justo en el último gol del partido, el arquero Oswaldo Sánchez sufrió luxación del hombro izquierdo, misma lesión que presentó en el torneo anterior, cuando los laguneros igualaron ante los Tecos. Curiosamente en ambas ocasiones la dislocación se dio después de goles anotados por los rivales.
Con ocho minutos por jugar, más el descuento, Miguel Becerra sustituyó al portero nacional, siendo exigido inmediatamente por la artillería anfitriona desde todos los ángulos, incluso el Gaby Pereyra tuvo el triunfo en sus pies pero dejó escapar algunas ocasiones de gol.
En el principio del partido, los albiverdes no podían salir de su territorio, perdiendo los balones con mucha facilidad, situación que aprovecharon los locales para hacerse de la posesión de la pelota y del partido.
Daniel Ludueña fue bien marcado por la zaga quintanarroense, por lo que la ofensiva santista perdió mucho poder, jugando de manera muy aislada tanto “Chucho” Benítez como el “Toro” Vuoso.
El arquero y capitán albiverde Oswaldo Sánchez, previo a su lesión se erigió como una de las figuras importantes del partido, al atajar de manera espectacular las aproximaciones más claras de los azulgranas en la parte inicial.
En primera instancia, al minuto 30 tapó un obús del “Chema” Cárdenas, quien había sembrado a la zaga lagunera por el centro del campo, pero el arquero rechazó a tiempo ante el acoso del venezolano Giancarlo Maldonado, que estaba en fuera de lugar.
Dos minutos después, el delantero vinotinto se quitó elegantemente la marca del “Tano” Ortiz para enfilarse al arco comarcano, pero de nueva cuenta el mundialista en Alemania 2006 evitó la caída de su marco.
Gabriel Pereyra fue un verdadero dolor de cabeza para Santos Laguna, quien aprovechó los espacios para generar un sinnúmero de llegadas, así como rematar al arco con mucha facilidad.
El argentino estuvo a punto de hacerse presente en el marcador pero un reflejo felino de Sánchez con el pie alcanzó a desviar con angustia el balón. Los cambios influyeron para el mejoramiento del Atlante, no así para los dirigidos por Daniel Guzmán, los cuales nunca pudieron acomodarse en la cancha.
A Giancarlo le anularon un gol en fuera de lugar, el cual fue reclamado airadamente por toda la afición de Cancún, en tanto, a 15 minutos del final, Vuoso dejó ir la victoria para Santos Laguna, al disparar desviado un gran servicio de Benítez, quien lo había dejado solo ante Vilar.
Ya en tiempo de compensación se combinaron los dos grandes relevos atlantistas, cuando Toledo cedió a Nkong, pero el africano estrelló su disparo en el travesaño. En la penúltima acción del partido, de nueva cuenta el camerunés casi anota, dejando ir la última Pereyra en desviado remate con la testa.