EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Debajo de una combi escolar fue abandonada una bebita que tenía unas cinco horas de haber nacido. La llamada oportuna de un vecino y la rápida movilización de la Cruz Roja y elementos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, permitió salvar a la pequeña que cerca estuvo de morir por hipotermia o asfixia, ya que estaba en una bolsa de plástico.
Socorristas de la benemérita institución informaron que a las 7:18 horas se recibió una llamada en el 066 de Emergencia, reportando una niña abandonada frente a la calle Rosa de Castilla número 112 de la colonia La Dalia.
En pocos minutos llegaron patrulleros de la DSPM y la ambulancia de la Cruz Roja cuyos socorristas levantaron el cuerpo de la pequeñita que ya había sido auxiliada por las personas que la habían encontrado dentro de una bolsa de plástico y en una mochila.
La niña fue trasladada de inmediato a las instalaciones de la Cruz Roja con la ayuda de los patrulleros de la DSPM que les abrían paso y en unos ocho minutos llegaron para que la pequeña fuese atendida por los médicos.
Carlos López Martínez, director médico de la Cruz Roja, informó que la niña ingresó a las 7:40 horas en estado de hipotermia y de inmediato se le brindó la atención que requería.
“Es muy probable que haya sido un parto séptico (contaminado), de tal forma que la bebita pudo haber nacido en una casa, sin los cuidados necesarios, pero ya se encuentra bien”.
Los médicos que atendieron a la recién nacida destacaron que de no haber sido rescatada del lugar donde se encontraba, lo más seguro es que en una hora más hubiese fallecido, ya sea por asfixia o hipotermia.
Agentes de la Policía Ministerial acudieron al lugar de los hechos para iniciar las investigaciones sobre la procedencia de la bebita. Una vecina de nombre Perla García, dice que como a las siete de la mañana escuchó ruidos en la calle pero no supo de quién se trataba.
La pequeña pesa tres kilos con 200 gramos y mide 51 centímetros, su estado de salud es bueno y permanecerá en la Cruz Roja hasta que las autoridades competentes -la Procuraduría de la Familia o el DIF Municipal-, dispongan lo procedente, según manifestó el director médico.
