Daniel Guzmán tiene su equipo base, y los refuerzos solamente llegan a apuntalar al cuadro, aunque la falta de un delantero efectivo es evidente. (Fotografías de archivo)
Santos Laguna busca en el extranjero a un goleador que acompañe a Matías Vuoso.
A siete semanas de su debut en el Apertura 2007, Santos Laguna se alista con sus nuevos refuerzos para tomar parte en un nuevo torneo, donde busca superar en lo deportivo, y en base a resultados, lo realizado en la anterior campaña.
La base de Santos Laguna en todas sus líneas ya está completa, solamente falta apuntalarla con un delantero no de renombre, sino efectivo a la hora de definir frente al marco. Se buscó en el Régimen de Transferencias de Cancún, pero lo poco disponible en el mercado estaba sobrevaluado, incluso jugadores no titulares en el pasado campeonato fueron comprados en miles de dólares, algo que sólo se da en nuestro balompié algo inflado.
En el Caribe mexicano se contrató a jugadores del amplio conocimiento de Daniel Guzmán, quienes entienden a la perfección su filosofía y los cuales no batallarán para adaptarse al esquema que implementa en la Comarca Lagunera. Además, con sus respectivos equipos en el Clausura 2007 fueron titulares inamovibles y regulares en su posición.
La afición, con ayuda de los medios de comunicación de la región, estaba esperanzada de acuerdo a los refuerzos llegados en diciembre pasado, en contrataciones de renombre y cartel, por lo que hasta el momento los cuatro nuevos refuerzos no llenaron las expectativas realizadas para este verano.
Los refuerzos hasta el momento han sido cuestionados, así como la directiva y cuerpo técnico por firmarlos. Sin embargo, son futbolistas probados en el máximo circuito. Juan Pablo Santiago es un sólido zaguero, al igual que Johnny García, quien sabe desempeñarse en la media de contención.
Jorge Barrera no fue muy regular en sus equipos y no es ubicado con precisión su manera de jugar, además de que viene del futbol estadounidense. Miguel Becerra es un arquero que aparte de ser efectivo bajo los tres palos colabora para favorecer un ambiente óptimo dentro del vestidor. Llegará para suplir a Oswaldo Sánchez cuando el capitán sea llamado para la Selección Nacional. Aunque, al igual que todos sus compañeros en Querétaro, fallaron gravemente en el decisivo partido del pasado torneo, sus cualidades son evidentes. En cuanto a eficacia y rendimiento para ayudar a su equipo, con sus actuaciones fue mejor que Oswaldo, sin llegar a comparar las trayectorias de ambos guardametas.
Los santistas en su gran mayoría ya se conocen y saben a lo que juegan, sólo falta que la delantera responda y Santos Laguna será un plantel protagonista. Los Guerreros comenzarán últimos en la tabla porcentual del descenso, un problema que no han podido erradicar.
No hay que olvidar el pasado
El Clausura 2007 para los Guerreros fue el peor arranque de su historia en torneos cortos, con dos empates y cinco derrotas en las primeras siete jornadas. La efectividad fue muy pobre y con graves problemas de descenso, al cosechar apenas dos puntos de 21 posibles.
Aunque no se había logrado una conjunción en todas sus líneas, había mucha llegada al arco rival, se generaban más ocasiones de gol, pero no se concretaban, a diferencia de sus rivales, que aprovechaban bien las situaciones que se les presentaban.
Al término de la jornada tres, Daniel Guzmán renunció ante el propio Carlos Fernández en la Capital del país, pero no le fue aceptada por el máximo dirigente de Grupo Modelo, ya que el proyecto que tenía en mente el comité deportivo del equipo era a largo plazo. Tan sólido es el proyecto, que si el “Travieso” llegara a ser cesado sería nombrado director deportivo de la institución. El sistema del estratega tuvo que variar radicalmente, ya que la ofensiva no le respondía a la hora buena y apostó por un juego más efectivo, dejando al lado el espectáculo, con un trato digno del esférico y jugadores en lo individual, aptos para resolver los partidos.
Simplemente el resultado fue asombroso, de los últimos 14 encuentros disputados, incluidos repechaje y cuartos de final, los albiverdes apenas fueron derrotados en tres ocasiones, en todas por la mínima diferencia. En la fecha diez por los Tigres, en la 16 por Pachuca y en la ida de la repesca por el San Luis.
En temporada regular consiguió 20 puntos de 30 posibles en los últimos diez partidos, lo que le alcanzó para salvarse del descenso, con la colaboración de los Rojinegros del Atlas, que derrotaron en el último juego al Querétaro, aunque los Gallos Blancos con sus errores perdieron la categoría.
Se jugarán 34 jornadas antes de conocer al nuevo inquilino de la Primera A, por lo que los albiverdes apuntan sus baterías a escuadras que están en la misma situación, los Tiburones Rojos del Veracruz y el benjamín, La Franja del Puebla.
Hace un año los comarcanos aventajaban con diez puntos a los Pumas y en ese entonces ni el técnico Wilson Graniolatti ni el director deportivo José Antonio Noriega se preocuparon de la situación. Ahora los universitarios superan a los santistas por casi 15 unidades.
Habrá tres principales objetivos que cumplir para Santos Laguna el próximo torneo. El primero será sumar la mayor cantidad de puntos posibles para ascender poco a poco en la tabla porcentual. El segundo es calificar a la liguilla, el cual se dará automáticamente en caso de lograrse el primero.
Por último, buscarán agradar a la afición con actuaciones espectaculares y un futbol vertical, el cual se vio por momentos en la pasada competencia, aunque todo dependerá de sus delanteros, ya que sin goles el trabajo de nada servirá.
