El presidente de Murray Energy Corporation, Robert Murray, visita el túnel bloqueado en el Cañon Crandall, donde seis mineros continúan atrapados hoy, 9 de agosto de 2007, en Huntington, Utah, EU.
Las plataformas taladradoras colocadas en una ladera llegaron hoy a varias decenas de metros de seis mineros, tres de ellos mexicanos, atrapados por un desprendimiento, dijo uno de los propietarios de la mina.
De los dos ductos taladrados simultáneamente, el menor tiene como fin establecer si los mineros siguen con vida tras el derrumbe del lunes, pero los equipos de rescate no están seguros de que el túnel de 6.35 centímetros de diámetro (2.5 pulgadas) vaya en la dirección adecuada.
El agujero busca proporcionarles una entrada de aire y un sistema de comunicación de dos vías, así como permitir la entrada de una cámara pequeña con el fin de buscar señales de vida.
"Es posible que no escuchemos ningún ruido", advirtió Bob Murray, propietario de un porcentaje de la mina Murray Energy Corp., y también presidente de ésta. "Podrían estar muertos".
El equipo de perforación fue colocado a 569 metros (1.869 pies) por encima de la ubicación donde se presume están los hombres, y cerca del mediodía había perforado unos 466 metros (1.530 pies).
Murray advirtió que las cosas podrían salir mal, incluyendo descomposturas de equipos y la posibilidad de que el taladro haya estado mal dirigido con relación al sitio donde están los mineros.
"Podríamos salir en otro lado de la mina, distinto al que queremos. Podríamos salir donde haya una columna sólida y tendríamos que comenzar todo de nuevo", agregó.
Simultáneamente se está perforando un segundo túnel más amplio, de casi 23 centímetros (9 pulgadas) de diámetro, pero al mediodía sólo había alcanzado 108 metros (355 pies). Este agujero de mayor tamaño podría ser empleado para introducir cámaras más sofisticadas y pertrechos.
Por su parte, el presidente mexicano Felipe Calderón dijo que su gobierno está atento de la situación de los tres mineros oriundos de México que se encuentran atrapados.
"Aprovecho para manifestar mi pesar y para decir que mi gobierno y yo nos mantenemos alertas al desarrollo de las labores de rescate de los seis mineros que se encuentran atrapados en el estado de Utah, de los cuales tres son mexicanos", señaló durante una gira por el estado de Michoacán, en el occidente de México.
"Oramos por ellos, por sus familias, pero también estamos vigilantes de que se respete la condición de trabajo y de dignidad de vida de todos los mexicanos en Estados Unidos", añadió.
La conferencia de prensa ofrecida por Murray antes del amanecer inyectó cierto optimismo tras los temblores del martes, que anularon los avances logrados en el despeje de las galerías. Los mineros se encuentran a 5.47 kilómetros (3.4 millas) de la entrada de la mina Crandall Canyon, situada a 225 kilómetros (140 millas) al sur de Salt Lake City. Las tareas de despeje fueron reanudadas el miércoles.
"Estoy seguro que para ahora sus lámparas ya se han apagado. Estoy seguro que está totalmente oscuro", dijo el minero Robby Robertson, de 27 años, que trabajó en la mina hace varios años. "Imagine el lugar más oscuro en el que haya estado".
Sin embargo, Murray dijo que si los mineros sobrevivieron al derrumbe, probablemente estén la mayor parte del tiempo en la oscuridad para ahorrar las baterías de sus lámparas, que normalmente duran unas 12 horas cada una.