Se ha concluido la primera etapa de remoción de 530 mil metros cúbicos de tierra. (Archivo)
Este martes se cumple un mes de una las mayores tragedias en la historia de Chiapas, cuando un alud destruyó el poblado Juan de Grijalva y sepultó a 25 personas.
La noche del domingo 4 de noviembre, la tierra generó un tapón en el caudaloso río Grijalva, donde se formó una enorme ola que arrasó con el poblado y sepultó a 25 personas, de las que aún se busca a seis.
Hoy ha concluido la primera etapa de remoción de 530 mil metros cúbicos de tierra, pero de inmediato ha comenzado una segunda que se espera terminar el 15 de diciembre.
En entrevista, el subsecretario de Protección Civil, Manuel García Moreno, aseguró que los trabajos coordinados por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y Comisión Federal de Electricidad (CFE) han llegado a la cota 100.
'Cuando se cumpla la primera quincena de este último mes del año, el nivel del alud deberá ubicarse en la altura 98, a la vez, con la misma tierra que se revierte del cauce se construirán dos bordos, uno a cada margen del caudaloso afluente', explicó.
Precisó que en esta segunda etapa se espera remover entre 35 mil y 40 mil metros cúbicos de tierra por día, a fin de llegar a los 92 metros sobre el nivel del mar.
Destacó que la labor en el sitio, donde fue el poblado Juan de Grijalva, municipio de Ostuacán, se ha incrementado con 104 máquinas y un total de 700 personas, de ambas paraestatales.
El funcionario estatal destacó que a partir del 15 de diciembre se espera comiencen a fluir poco a poco las aguas del caudaloso afluente.
Sin embargo, aclaró que fue necesaria la evacuación de 33 poblaciones que se encontraban en riesgo; 'no podrá haber más familias más debajo de la cota'.
A la fecha, unas dos mil 500 personas permanecen en albergues en los municipios de Ostuacán y Tecpatán, a quienes el gobierno del estado garantizan el abasto alimentario.
