El presidente del CLIP, Víctor Tumoine declaró que de aprobarse la iniciativa de reforma fiscal presentarían los empresarios una lluvia de amparos. (Fotografía de Ángel Padilla)
TORREÓN, COAH.- Los empresarios laguneros rechazan la iniciativa de reforma del paquete de reforma fiscal, particularmente la creación de un nuevo impuesto denominado Contribución Empresarial a Tasa Única (CETU), ya que consideran que lejos de alentar la inversión, la creación de nuevos empleos y una derrama económica al país, tiene un impacto inverso al desalentar la atracción de nuevas inversiones al país.
Víctor Tumoine Villarreal, presidente del Consejo Lagunero de la Iniciativa Privada (CLIP), manifestó que “los empresarios no estamos a favor de esta iniciativa de reforma, ya que es una cosa muy delicada el CETU”. Consideró que de aprobarse este nuevo impuesto sólo se desalentaría la creación de empleos, ya que dicho gravamen podría superar a las utilidades que se generen o no dentro de una empresa.
A la espera de presentar una propuesta concreta a los diputados de La Laguna y a Javier Guerrero, senador de la comisión de Hacienda, Tumoine critico también la redacción ambigua de la iniciativa, lo cual la hace compleja para su instrumentación, dado que permite un sin fin de interpretaciones.
De acuerdo a los estudios realizados por fiscalistas que asesoraron a esta agrupación, se puso de manifiesto que el CETU afecta la consolidación fiscal para el pago de impuestos de las personas morales, situación que afecta a la totalidad de los sectores productivos, entre los que destacan; el primario, donatarias, escuelas y a los Repecos (Régimen de Pequeños Contribuyentes).
Dijo el presidente del CLIP que los sectores más sensibles serían aquellos que utilizan un mayor número de mano de obra en sus procesos productivos, como lo son las panaderías y maquiladoras, ya que pese a que el pago de nómina es parte de su gasto no podrán, de aprobarse, deducirlo de sus impuestos.
Sin duda, Tumoine manifestó que “nos puede afectar en la atracción de inversiones al país por este mayor pago de impuestos”, lo cual sacaría a México fuera de la competencia en relación a otros países del mundo.
Opinó que lo ideal habría sido que la presentación de una propuesta fiscal, en donde los impuestos incrementen la productividad y estimule la generación de empleos. “Lo mejor habría sido impulsar la ampliación de la planta productiva, generando más empleos, riqueza y un mayor pago de contribuciones”.
Una de las razones que manifestó el presidente del CLIP para rechazar totalmente el CETU, es que de acuerdo a estimaciones hechas por fiscalistas, al final las empresas cautivas estarían pagando entre un 20 a un 600 por ciento más de impuesto.
A la espera de entregar la semana entrante un documento a legisladores, advirtió que de pasar la propuesta de reforma fiscal lo que se dejaría venir es una lluvia de amparos, ya que los hombres de empresa no dudarían en presentar dicho recurso legal ante iniciativas meramente recaudatorias, sin presentar acciones para reducir su elevado gasto de Gobierno.