El solista invitado para el primer concierto de la Segunda Serie de la Camerata fue Emilio Angulo. (Fotografía de Érick Sotomayor)
Con gran calidad inició la Segunda Serie de la Temporada 2007 de la Camerata de Coahuila, que tuvo como solista invitado al pianista Emilio Angulo.
La noche del viernes el público recibió con sus aplausos al director de la orquesta, el maestro Ramón Shade.
El programa inició con el Concierto Para Piano No.1 en Do Mayor, que resultó como una alegre fiesta en los oídos, a la interpretación de la Camerata se añadió de forma exquisita la técnica del maestro Angulo, quien desde la primera nota dominó perfectamente el piano y logró el inicio tranquilo de los 12 compases, a lo cual le siguió el carácter marcial de la obra.
Conforme la obra se fue desarrollando, fue como si se abriera un abanico de sorpresas y nuevas soluciones, el piano se percibió diferente en cada movimiento, el músico dejó de manifiesto que este instrumento tiene un amplísimo espectro de posibilidades y sonidos casi ilimitados, que subliman el trabajo de Beethoven.
Gran musicalidad demostró Angulo, quien además de ser un pianista de técnica depurada y notas muy limpias, también sabe imprimir gran sentimiento a sus interpretaciones con la misma sutileza con la que maneja el piano.
Elegante pudiera ser una manera de resumir el trabajo de los músicos en esta obra, sobretodo en el segundo movimiento, un Largo tocado en la susceptible tonalidad en La bemol Mayor. Este espacio fue sugestivo por la mezcla de expansión y expresividad de la melodía que resultó muy bella y salpicó de romanticismo la noche, pues se notaron los cimientos románticos de Beethoven.
Y finalmente el tercer movimiento, un luminoso Rondo Allegro con dos variaciones para solo de piano dentro del tema principal, el cual fue interpretado con toda precisión y musicalidad por el maestro Angulo. La obra cerró ante un impresionado público que entregó sus aplausos a los músicos, y además ovacionando el trabajo de Angulo, quien con gusto respondió regalando como encore un adagio más de Beethoven.
Luego del intermedio, la orquesta salió nuevamente al escenario para tocar la Sinfonía No.2 en Re Mayor, Op 36., fastuosa y divertida, la melodía se coló por los oídos de los espectadores como un aire de innovación, planteado perfectamente gracias a la batuta de Ramón Shade, que manejó la obra con su acostumbrada precisión y esmero. Así, inició la Segunda Serie de este año de la Camerata de Coahuila, que para su concierto del 24 de agosto impactará a los laguneros con la ópera La Traviata, en la que se hará acompañar de Olivia Gorra, Fernando de la Mora, Jesús Suaste, César Piña e Itziar Muguerza.
