Ayer en forma aparente se tenía más control sobre el incendio en la zona rural del municipio de Durango, pero la Conafor estima que se sofocará hasta el próximo sábado.
El Siglo de Durango
Unas mil cabezas de ganado, sólo en el ejido de Chupaderos, resultaron afectadas por el incendio que se registró en este lugar, ya que estos animales no tendrán qué comer, por lo que pidieron subsidios para forraje al Gobierno del Estado, pues de lo contrario presumen que muchas reses podrían morir.
Ayer, El Siglo de Durango realizó un recorrido por el poblado Chupaderos, uno de los que resultaron afectados por el enorme incendio que abarcó a varias localidades, en donde el comisariado ejidal Sergio Guadalupe Burciaga Flores manifestó que hay posibilidades de que algo de ganado haya muerto a causa del siniestro.
Indicó que el reporte del incendio se lo hizo a él el Consejo de Vigilancia, desde el primero de mayo, por lo que se dio aviso a las autoridades en forma inmediata, de las cuales refirió a la Gerencia Regional de la Conafor, pero que fue hasta el día 2 de mayo cuando comenzaron a acudir.
Incluso, ayer indicó que de acuerdo con los informes del Consejo de Vigilancia del ejido que él representa, se dio a conocer que no había presencia de brigadistas, a pesar de que el incendio continuaba en la zona de agostadero, aunque las autoridades de la Gerencia Regional de la Conafor informaron que se estaban atacando los principales puntos para evitar que el siniestro siguiera extendiéndose.
El entrevistado explicó que ya algunos ejidatarios de lo 47 que conforman el ejido habían llevado a sus animales a pastar hacia esta región, ya que en la zona baja prácticamente ya se había terminado el alimento; sin embargo, dijo que el pasado jueves y miércoles, elementos del Consejo de Vigilancia habían observado a algunas reses “corriendo como locas”, posiblemente afectadas ya por el fuego. Sin embargo, lo anterior aún no se confirma.
Sergio Guadalupe Burciaga informó que se espera recibir el apoyo del Gobierno del Estado, incluso de las autoridades federales, pues de lo contrario adelantó que tendrán problemas.
Agregó que la información que estuvo proporcionando y que le dio el Consejo de Vigilancia del ejido rápidamente circuló hacia él, puesto que se estaban construyendo bordos de abrevadero, para lo cual incluso hubo que proteger la maquinaria que estuvieron utilizando durante los últimos días, puesto que estaba expuesta al fuego que podría cambiar de curso, según la dirección del viento.
Todos, afectados por el incendio
Rodolfo Delgado Hernández tiene 73 años de edad y se dio cuenta cuando inició el fuego atrás de los cerros de donde se encuentra el poblado de Chupaderos. Afirma que él no tiene animales, pero sus familiares sí.
“El más ‘jalao’ tiene unas 30 cabezas de ganado, hay algunos que tienen más, pero todos serán afectados por el incendio que se registró, pues el fuego arrasa con todo”, añadió.
Agrega que si les va bien y si llueve, para finales de junio podría existir algo de pasto para alimentar a sus animales, pero de lo contrario no habrá nada por lo que el ganado podría morir y la gente de Chupaderos podría perder sus bienes en este sentido.
Dice esperar a que el Gobierno del Estado apoye con alimento para el ganado, puesto que, de lo contrario, no habrá qué darles de comer.
