Villa Montemorelos, Dgo.- Bernardo Patricio Urzúa, director del área de Formación de Desarrollo Familiar y Humano del Instituto Tecnológico de Villa Montemorelos, señaló se suman a la tarea emprendida por la señora Gabriela López de Hernández, dando un ejemplo claro de la importancia de incorporar a los jóvenes para elevar la calidad educativa a través de una adecuada orientación.
Indicó que se ha trabajado con el estudiantado, brindando conferencias con temas de actualidad como noviazgo y sexualidad, autoestima, depresión entre otros, beneficiando a 120 alumnos, además de atender en terapia individual a 24 de ellos.
El impacto generado en esta institución de educación superior, se suma a los trabajos que se realizan en 20 municipios y que en un año de trabajo se han atendido tres mil 718 familias, beneficiando a 18 mil 590 personas.
Tratando de llegar a esta parte importante de la familia se ha estado trabajando por lapso de dos semestres con el Instituto Tecnológico de Villa Montemorelos, a petición de su director Manuel Álvarez Gallegos quien manifiestó que la atención que se ha estado brindando por parte de los Orientadores Familiares “ha contribuido en gran medida a atender principalmente problemas de ausentismo, dificultades para integración y adaptación dentro de la escuela, así como auto estima y problemas familiares que presentan los alumnos, lo cual beneficia a estos a un proceso de enseñanza-aprendizaje con eficacia.”
Cabe mencionar que las actividades realizadas dentro de la Coordinación de Orientación Familiar están enfocadas a lograr el bienestar de todas las familias del estado, teniendo como principal objetivo la concientización de los padres como agentes educadores y formadores de los hijos; así como el proporcionar las herramientas necesarias para que la familia encuentre soluciones a los conflictos que día a día afectan la convivencia y la armonía familiar, esto mediante una cultura de valores, a favor de la vida y el desarrollo humano de nuestras familias.
Percatándonos que estas herramientas deben ser brindadas a todos los integrantes de la familia, y aprovechado las invitaciones de diferentes instituciones educativas, se ha podido llegar a los jóvenes; hijos de familia que deben participar en la dinámica familiar y que muchas veces por ignorancia, apatía y flojera, no lo hacen.
